Cada vez son más las personas que eligen mirar con otros ojos eso que, hasta hace poco, terminaba sin pensar en la basura. Reciclar y reutilizar objetos cotidianos no solo es una forma de cuidar el planeta, también es una oportunidad para crear con las manos, ahorrar dinero y sumar detalles personalizados en casa.
¡No los tires! Las mejores ideas para reutilizar los corchos de vino y sumar estilo al hogar
Con propuestas creativas y fáciles de hacer, estos pequeños objetos pueden transformarse en organizadores, centros de mesa, posavasos y sellos decorativos.
-
Estos 10 objetos los tienen todos en su casa y probablemente no sabías que se pueden reciclar
-
No tires tus latas de atún: cómo reutilizarlas

Resistentes y versátiles, los corchos de vino pueden usarse para decorar y organizar distintos espacios del hogar.
Los corchos de vino, por ejemplo, suelen acumularse después de una comida o una celebración. Y lo que muchos no saben, es que tienen un montón de potencial: son livianos, resistentes y poseen una textura rústica que combina a la perfección con estilos cálidos y naturales. Así, con un poco de imaginación y sin necesidad de ser experto en manualidades, podés transformarlos en elementos útiles, decorativos o incluso regalos únicos. ¡Tomá nota!
Las formas más creativas de reciclar corchos
1. Posavasos y apoya fuentes
Con varios corchos y un poco de pegamento, se puede armar un posavasos artesanal, firme y original. Hay muchas formas de hacerlo: uno de los más comunes es cortar los corchos a lo largo (por la mitad) y pegarlos en fila sobre una base de cartón o madera. También se pueden cortar en rodajas y unirlas en forma circular o cuadrada, tipo mosaico.
Siguiendo el mismo procedimiento, podés crear un apoya ollas o salvamantel térmico. No solo resiste el calor, sino que también protege la mesa o mesada con estilo.
2. Tablero de notas o porta llaves
Uno de los usos más prácticos y decorativos para los corchos de vino es convertirlos en un panel organizador para la pared. Se pueden pegar uno al lado del otro sobre una base rígida, como un marco viejo, una madera o incluso cartón firme, hasta cubrir toda la superficie. Este funciona como un tablero donde podés clavar chinches y colgar notas, fotos, entradas, collares o llaves. Ideal para tener en la entrada de casa, el escritorio o la cocina.
3. Letras decorativas
Pegando corchos sobre una base con forma de letra (de cartón o madera), podés crear iniciales o palabras completas. Perfectas para decorar habitaciones, cocinas o eventos.
4. Patas niveladoras para muebles
Si tenés una silla o mesa que desnivelada o inestable, cortá una rodaja de corcho y colócala en la pata más corta. Es un truco simple, funcional y ecológico.
5. Sellos caseros
Cortando la base de un corcho y tallando una forma con cúter (corazón, estrella, hoja), podés hacer sellos para decorar papel, tela o cartón. Perfecto para proyectos DIY con niños.
- Temas
- Reciclaje
Dejá tu comentario