Las Leonas arrasaron en la final y se alzaron con un nuevo título

Las Leonas se repusieron de un mal comienzo y se quedaron con el torneo con mucha autoridad.

La selección argentina femenina de hockey sobre césped, Las Leonas, ganaron la Liga Mundial tras vapulear por 5 a 1 a Nueva Zelanda en Rosario y ratificaron así su condición de equipo líder.

En una brillante actuación, el equipo dirigido por Gabriel Minadeo empezó a definir la historia en el segundo cuarto, con goles de María Granatto y Pilar Campoy, a los 15 segundos y a los 13 minutos, respectivamente.

Nueva Zelanda descontó a través de Anita Punt, a los 3 minutos del tercer cuarto, mediante un córner corto.

Cuando peor la pasaba, Argentina liquidó la historia por medio de Carla Dupuy y Noel Barrionuevo, a los 11 y 13 minutos, respectivamente.

En el último cuarto, Las Leonas cerraron una actuación memorable cuando Delfina Merino convirtió, de contra golpe, a los 3 minutos.

En el primero, el equipo dirigido por Gabriel Minadeo llevó la iniciativa, se plantó en campo rival y tuvo algunas aproximaciones.

Con ataque por los costados, intentó lastimar a una Nueva Zelanda que apostó a lastimar de contragolpe.

Cuando recién comenzaba el segundo cuarto, Granatto metió una buena diagonal desde la izquierda hacia el centro, dejó tres rivales en el camino y definió de manera precisa para conseguir el tanto.

Lejos de conformarse, Las Leonas fueron por más y pudieron haber aumentado un minuto después a través de Carla Rebecchi, pero su definición se fue apenas ancha.

Cuando estaba por llegar el entretiempo, Campoy (autora del tanto de semifinales ante China) marcó luego de tomar un rebote producto de un córner corto ejecutado por Barrionuevo.

En el tercer cuarto, Nueva Zelanda se metió en partido a través de una excelente ejecución de Punt en un córner corto.

El equipo oceánico dominó el juego a través de una muy buena presión que llevó a que Argentina estuviera imprecisa con la bocha.

Sin embargo, un contragolpe de Agustina Albertario fue una llamado de atención para lo que vendría después: un nuevo tanto del local, que desactivó cualquier intento de reacción visitante.

En una muy buena combinación dentro del área, Rocio Sánchez Moccia habilitó a Merina, que a su vez cedió a Dupuy para que definiera al fondo del arco.

Para asegurar el pleito y antes que termine el cuarto, Barrionuevo le dio a Argentina su cuarto gol, mediante un córner corto.

Con Nueva Zelanda volcada en ataque, aparecieron los espacios en el último cuarto y, luego de un muy buen contra golpe manejado por Rebecchi, Merino "fusiló" a la arquera para aumentar el marcador.

Previo al partido, se realizó un emotivo reconocimiento a Luciana Aymar, ya que el estadio mundialista de esta ciudad comenzó a llevar el nombre de quien fuera la mejor jugadora del mundo por varios años.