Con reservas en rojo y un equipo económico ávido de divisas para intentar sostener su esquema cambiario, las novedades en el frente externo vienen jugando un papel clave. El foco está puesto, sobre todo, en dos variables: la cotización del real brasileño y el precio internacional de la soja, que patearon en contra de los objetivos oficiales durante el último tiempo. Por estos días, la moneda brasileña revirtió sus caídas y trajo cierto alivio en las presiones sobre la brecha cambiaria. Pero la oleaginosa profundizó su descenso y sumó nuevos dolores de cabeza ante la necesidad de recomponer las arcas del Banco Central.
Dólar: el real le da un respiro al CCL, pero el desplome de la soja complica al Gobierno
La soja sigue en caída libre y retrocedió otro 2,33% este martes. Queda más de la mitad de la cosecha por vender y el precio será clave para las reservas. Mayor flujo hacia emergentes revirtió parte de la devaluación del real.
-
Proponen una salida sostenible del cepo con un guiño al fin de la convertibilidad
-
Bonos en dólares revirtieron baja inicial y subieron; ADRs cerraron con mayoría de alzas en Wall Street
La soja, el principal commodity de exportación de Argentina, no para de caer en el mercado de Chicago. Esta semana el desplome se aceleró luego de la publicación del último informe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), que elevó las perspectivas de una súper cosecha en ese país ahora estimada en 124,9 millones de toneladas, lo que representaría un récord histórico. La mayor oferta mundial arrastró la cotización hacia abajo.
Este martes, el futuro de la oleaginosa a agosto retrocedió otro 2,33% hasta los u$s363. El contrato a septiembre se negociaba por debajo de los u$s350 (a u$s348). Se trata del nivel más bajo, medido en términos reales, desde 2006.
Visto en perspectiva el derrape es considerable. El grano de soja acumula un descenso del 8% respecto del mes pasado, al tiempo que sus derivados (aceite y harina) pierden más de 10% en el mismo lapso. En lo que va del año, el derrumbe se acerca al 30%, según datos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Para el Gobierno el problema cobra cada vez más relevancia. Con reservas negativas por alrededor de u$s6.000 millones, Luis Caputo necesita detener la sangría en las arcas del BCRA para intentar convencer al mercado de que su hoja de ruta es sostenible. Mantener el esquema cambiario actual, el crawling peg del 2% mensual y cerrar la brecha para, en algún momento abrir el cepo sin salto devaluatorio, aparece como un desafío cuesta arriba sin divisas en el Central.
En momentos de estacionalidad siempre desfavorable para el flujo de dólares, las miradas se dirigen hacia el 50% de la cosecha que aún no se comercializó. La soja en estos niveles atenta contra el ingreso de esos dólares. Por lo pronto, en los últimos días el ritmo de liquidación se redujo con productores acostumbrados a sentarse sobre sus granos como resguardo de valor en momentos de incertidumbre.
En ese marco, el sector agroindustrial le reclama una baja de las retenciones al Gobierno. Gustavo Idígoras, presidente de CIARA-CEC, dijo que si eso ocurriera podrían ingresar u$s5.000 millones en los próximos meses. Pero el equipo económico es reacio a esa posibilidad ante la prioridad de mantener el equilibrio fiscal (como ya dijo Javier Milei en su discurso en la Sociedad Rural).
Más allá de las necesidades de corto plazo, las dudas también asoman de cara al próximo año ante proyecciones que marcan un escenario poco alentador en materia de precios internacionales.
“Hay datos que siguen jugando a favor de mayor oferta en la soja mientras la demanda no logra repuntar. Creo que ningún país puede pasar a ser una economía pujante de manera sostenible en el tiempo por los precios de una cosecha. De todas formas, sí puede ayudar a que salgamos más rápido y es ahí donde nos pega”, le dijo a Ámbito Andrés Reschini, de F2 Soluciones Financieras.
Por lo pronto, en los primeros siete meses de 2024 la liquidación de divisas del sector cerealero-oleaginoso fue de u$s13.640 millones, según CIARA-CEC, la cámara que agrupa a las grandes agroexportadoras. El número se ubica por debajo de los más de u$s16.000 millones que marca el promedio de los últimos cinco años.
El dólar y el real
En ese marco, en los últimos días hubo un respiro en el frente externo. La cotización del real, la moneda del principal socio comercial de Argentina, fue otro factor que había jugado en contra a lo largo del año: entre el final de 2023 y el 2 de agosto pasado, el dólar en Brasil había acumulado una suba del 18% hasta tocar los 5,73 reales.
Sin embargo, luego del cimbronazo que vivieron los mercados globales el lunes de la semana pasada, hubo un renovado flujo de capitales hacia países emergentes ante la aparente disipación del escenario recesivo que asomaba en Estado Unidos. Desde ese día hasta hoy, el real y otras monedas emergentes mostraron cierta recuperación. Por caso, el dólar en Brasil descendió 4,9% en ese lapso.
Esa recuperación de las monedas emergentes, y en particular del real, trajo un alivio para la cotización de los dólares financieros en Argentina, cotizaciones que desde el mes pasado son intervenidas con venta directa de reservas por parte del BCRA. Este martes, por caso, el contado con liquidación (CCL) y el MEP bajaron a $1.266,98 y $1.272,49, respectivamente, y la brecha con el tipo de cambio mayorista cedió a alrededor del 35%. Antes del comienzo de las intervenciones del Central, el spread cambiario se ubicaba en torno al 60%.
En ese sentido, Reschini señaló: “Lo que se está viendo es mayor interés por emergentes. Esos flujos estarían fortaleciendo las monedas de esos países y miramos Brasil por lo estrecho del vínculo comercial. En el caso de que el mercado siga viendo una baja de tasas de la FED, seguirá el interés por emergentes y por ahí parece que va el view del mercado. Si renacen los temores inflacionarios en EEUU y se incrementan las chances de que se mantengan las tasas altas, puede volver a debilitarse el real pero para el mercado es menos probable por ahora este escenario”.
En definitiva, será clave lo que ocurra en las próximas ruedas en un frente cambiario local que parece tener aún un escenario abierto.
- Temas
- Dólar
- Soja
- real brasileño
Dejá tu comentario