7 de junio 2016 - 00:00

A rodar

• Mientras las ventas de O km siguen creciendo ante el asombro de propios y extraños, hay una tormenta que no deja de amenazar el horizonte automotor. La situación laboral en algunas empresas es delicada. Es que por más que el mercado interno muestre una recuperación alentadora no llega a compensar la caída de las exportaciones por la crisis de Brasil. Incluso, si se mide en unidades no parece tan grave, pero si se tiene en cuenta el factor económico, la situación es peor. Gran parte de la mejora del consumo interno se está logrando a base de sorprendentes promociones que licuan la rentabilidad, mientras que las operaciones hacia el país vecino dejaban, en su mejor momento, una ganancia que se recuerda con nostalgia. Días atrás, Cristiano Rattazzi, presidente de FCA, alertó por las consecuencias que podría tener para las plantas locales que no se modifique las relación de intercambio con ese país (lo que se conoce como flex). Dijo, concretamente, que se podría parar la producción de autos en la planta de Córdoba para el mercado por falta de piezas importadas. Es que las importaciones desde ese país están superando el límite permitido y eso significaría que las terminales deberían pagar un multa, algo que ya se adelantó en esta columna. Esto se debe a que, como contrapartida, las exportaciones caen y agrandan el déficit.

• Pero ésta es una parte del problema que genera la crisis en ese país. Hay otra y tiene que ver con lo laboral. En algunas automotrices el clima es tenso y, como sucede en estos casos, abundan los rumores. Incluso, llegan desde afuera versiones apocalípticas debido a una reestructuración mundial, con graves coletazos locales. Una fuente privilegiada cercana a esa empresa revitalizó el tema y lo vinculó a la pulseada con el gremio. Los sindicalistas son indomables, dijo para definir la situación respecto de la negociación que mantienen por suspensiones y despidos. Explicó que para suavizar las demandas a veces es necesario pintar un panorama sumamente crítico, casi terminal. Para despejar dudas, la misma fuente dejó trascender una información importante. Esa empresa anunciará antes de fin de año o en los primeros meses de 2017 una inversión para producir un nuevo modelo que le garantizaría por unos cuatro años un horizonte industrial previsible, algo que en la actualidad no es tan consistente ya que los vehículos que hoy fabrica están quedando desactualizados.

Horacio Alonso

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