Asesinan a policía delante de su hijo

 Un suboficial de la Policía Federal Argentina (PFA) fue asesinado ayer a balazos tras tirotearse con dos delincuentes cuando acompañaba a su hijo adolescente a la parada del colectivo, en el partido bonaerense de Quilmes, informaron fuentes policiales.

Se trata del sargento primero Ramón Oscar Nieto (50), quien se convirtió en el quinto efectivo de dicha fuerza que en lo que va del año murió baleado por enfrentarse con asaltantes.

Fuentes policiales informaron que el crimen de Nieto fue cometido ayer a la mañana, alrededor de las 7, en las calles 818 y 893 del barrio La Paz de Quilmes Oeste, en la zona sur del conurbano, donde el suboficial residía junto con su familia. De acuerdo con los voceros, el policía caminaba a junto a su hijo de 13 años, al que acompañaba hasta la parada de colectivos para que luego se dirigiera a la escuela, cuando advirtió que por la vereda de enfrente se acercaban dos sospechosos, uno de ellos armado, con aparentes fines de robo.

En esas circunstancias, se originó un tiroteo entre Nieto y los sospechosos, a raíz de lo cual, el policía recibió un balazo en el pecho y otro en una pierna, que lo dejaron malherido.

Tras el enfrentamiento, los delincuentes huyeron sin robar, mientras que la víctima fue trasladada de urgencia al Hospital El Cruce de Florencio Varela.

Las fuentes precisaron que Nieto, quien prestaba servicios en la División Delitos Económicos de la PFA, fue intervenido quirúrgicamente aunque murió poco después por la gravedad de la herida de bala que presentaba en el pecho.

Luego, a partir del testimonio del hijo de Nieto, que resultó ileso, los pesquisas de la comisaría 5ª de Quilmes, con asiento en La Cañada y jurisdicción en el lugar del hecho, detuvieron a un vecino del barrio que se aprestaba a ingresar a una casa.

Los voceros policiales identificaron al sospechoso Cristian Andrés Salas (19), quien tenía una herida de bala en un brazo y cuatro en una pierna y al que se le secuestró una pistola Bersa calibre .22, que se sospecha fue el arma homicida.

Al continuar con la pesquisas, el personal policial detuvo poco después del mediodía, también en La Cañada, a un segundo sospechoso, de 27 años, acusado de ser el cómplice de Salas, sindicado como el autor material del crimen, dijeron los informantes.

Los dos sospechosos apresados y la pistola incautada quedaron a disposición del fiscal Ariel Rivas, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 del Departamento Judicial Quilmes, a cargo de la causa.

El último policía federal asesinado había sido el cabo Gonzalo Pérez (37), quien el 2 de junio murió tras recibir un tiro y catorce puñaladas por parte delincuentes a los que había ido a buscar porque instantes antes habían intentado robarle a su mujer, en la ciudad santafesina de Santo Tomé. El mismo día, el sargento primero Juan Orlando Castillo (44) fue asesinado de un tiro en la cabeza por uno de los cuatro ladrones que asaltaron a un financista en Villa Crespo.