27 de noviembre 2018 - 00:00

Ya suman cuatro los militares en el gabinete de Bolsonaro

Es una situación inédita en democracia. Ese general retirado será el encargado de articular las relaciones entre el Gobierno y el Congreso. Los analistas dudan de su capacidad para el cargo.

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Río de Jeneiro - El presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, sorprendió ayer al nombrar como su ministro de la Secretaría de Gobierno, encargado de la articulación con el Congreso, a un general retirado sin experiencia en la negociación política. Se trata del cuarto jefe militar del futuro gabinete, lo que, sumado a la figura del propio presidente, un excapitán del Ejército, y la de vicepresidente, el general Hamilton Mourão, genera resquemores sobre una amplia militarización del Gobierno que asimirá el próximo 1 de enero.

El designado es el general de división retirado Carlos Alberto dos Santos Cruz, quien fue comandante de las misiones de la ONU lideradas por Brasil en Haití y en el Congo.

Según los analistas, la designación inédita en democracia de un militar en la sensible área de la articulación política, además sin experiencia previa, refuerza la presencia del Ejército en el gabinete y sobre todo la figura de Mourão.

El propio Dos Santos Cruz debió salir al cruce de esas denuncias al afirmar que la persencia de varios generales en puesto clave no implica una militarización de la gestión.

Bolsonaro anunció la designación de Dos Santos Cruz mediante un mensaje en su cuenta de Twitter. El militar fue secretario de Seguridad Pública del Gobierno de Michel Temer en la época en la que se decidió la intervención militar en Río de Janeiro.

“Pese a que nunca tuve experiencia parlamentaria, voy a hablar con todo el mundo, inclusive con la izquierda, sin prejuicios. Mi experiencia de vida me garantiza para asumir este papel de darle atención al diálogo con el Congreso”, dijo el general.

Bolsonaro, que asumirá el 1 de enero, se ha rodeado del mundo militar en el gabinete, algo inédito desde la recuperación democrática de 1985.

Según reveló Ámbito Financiero antes de la primera vuelta, el alto mando del Ejército elaboró un proyecto en 2014 destinado a convertir a Bolsonaro en un presidenciable potable a fin de recuperar, a través suyo, protagonismo político. Esto incluyó asesorarlo para que limitara sus opiniones más revulsivas y abrazara el liberalismo económico.

“Hay sorpresa en el Congreso por la designación. Aparentemente habrá un intento de cambio de formas en la negociación con el Congreso, sobre todo porque ahora el Gobierno querrá aprobar la reforma previsional y la negociación la hará un general, algo inédito”, dijo un portavoz de un partido oficialista en el Senado.

El mandatario ultraderechista electo ya designó a ministro de Defensa al general Fernando Azevedo e Silva; en el gabinete de Seguridad Institucional al general Augusto Heleno Ribeiro, y encomendó el despacho de Ciencia y Tecnología al teniente coronel Marcos Pontes, único astronauta brasileño que viajó al espacio con la NASA.

Vinculados al mundo militar, nombró ministro de Educación al filósofo y profesor Ricardo Vélez Rodríguez, nacido en Colombia, profesor emérito de la Escuela de Comando y Estado Mayor del Ejército, y en Salud al diputado Luiz Henrique Mandetta, que fue teniente-médico del Hospital General del Ejército.

El abogado Wagner Rosario, ex capitán del Ejército y funcionario de Temer fue confirmado en la Contraloría General de la Unión.

La designación de Dos Santos Cruz confirma en avance de “los haitianos”, como se identifica a los generales que tuvieron experiencia internacional en la Minustah, la fuerza de paz de la ONU comandada por los brasileños en los años de Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff.

La negociación con el Congreso la hará también el jefe de gabinete designado, Onyx Lorenzoni, del derechista partido Demócratas, que se transformó en el principal partido aliado del Social Liberal (PSL) de Bolsonaro.

En Justicia, Bolsonaro nombró al exjuez Sérgio Moro, famoso por haber comandado la operación “Lava Jato” y condenado a prisión a quien sería el principal rival electoral del presidente electo, el expresidente Lula.

En el área económica, el gabinete tiene un dominio del sector financiero de la mano del exbanquero de inversión Paulo Guedes, que será una suerte de superministro de economía, con una agenda de privatizaciones de empresas públicas, el objetivo de reformar la ley jubilatoria y reducir el déficit fiscal a cero en 2020.Agencias Télam, AFP y ANSA,y Ámbito Financiero

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