Cumbre I: Macri y Lifschitz buscan acuerdo por envío de gendarmes

Mandatario socialista apunta además a destrabar negociación por deuda de coparticipación -tras fallo de la Corte- y a cosechar aval para bono.

Miguel Lifschitz

Mauricio Macri y el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, mantendrán un cónclave en Casa Rosada para definir el plan de seguridad -a largo plazo- que llevarán a cabo Nación y Provincia en el distrito que comanda el socialismo para combatir la inseguridad y el narcotráfico, que incluye la llegada de un importante contingente de Gendarmería.

Los mandatarios esperan, tras la reunión pactada para las 15, bajar tensiones tras dos meses de fuertes cruces políticos entre el PRO y el socialismo por la presión del oficialismo nacional para que el radicalismo deje de zigzaguear entre ser parte de Cambiemos y continuar en Santa Fe dentro del Frente Progresista que comanda Santa Fe desde 2007.

Esa disputa hizo que Macri definiese a Lifschitz como el gobernador "con menos vocación de trabajo en equipo", y activó la estructuración formal en Santa Fe del frente Cambiemos para agilizar el desligue del radicalismo del oficialismo provincial.

Sin embargo, las marchas "Rosario sangra" -el episodio 2 de las movilizaciones, el jueves último, incluyó también a la capital- en reclamo de protección ante un panorama de decenas de homicidios durante el corriente año pasaron las fronteras del distrito y llegaron a Casa Rosada, que dejó en manos de la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, el diseño de un plan para el arribo de gendarmes.

Las insólitas -y penosas- ambiciones de Bullrich en cuanto a comandar con exclusividad no sólo el operativo de Gendarmería, sino también a la Policía provincial (con auditorías y decisiones que sólo competen al distrito, excepto que existiera una intervención federal) colmaron la paciencia del Gobierno socialista, que activó un sendero de racionalidad en los últimos días con el ministro del Interior, Rogelio Frigerio.

"Bullrich estaba dinamitando todo. Tomamos muy bien la respuesta de Frigerio y la invitación de Macri", aseguraron a Ámbito Nacional desde Santa Fe.

Lo cierto es que el acuerdo para la llegada de agentes al distrito fue prometida y ratificada semanas atrás por el jefe de Gabinete, Marcos Peña, en la Cámara de Diputados, donde señaló que en el corto plazo serían 3.000 los gendarmes presentes en Santa Fe.

En la actualidad se encuentran poco más de 400 efectivos, por lo que el contingente a arribar sería de al menos 2.000 uniformados, más decenas de agentes que harán un trabajo más de inteligencia para desactivar a los peces gordos del narcotráfico. Todo, sin necesidad de choques internos entre personal federal y provincial.

Lifschitz llegará al cónclave con Macri con otros dos temas importantes para Santa Fe: por un lado, destrabar la negociación por la liquidación de los fondos que debe la Casa Rosada por el descuento -ilegal, según el fallo de la Corte Suprema de noviembre pasado- del 15% de la coparticipación con el que financiaba la ANSES, y el 1,9% que también le retenía la AFIP. La provincia mostró una cuenta por más de $50.000 millones.

El otro pedido será el aval de Nación -Ministerio de Hacienda y Finanzas Públicas- para que Santa Fe pueda colocar un bono por hasta u$s500 millones que la Legislatura provincial ya le votó a Lifschitz hace más de dos meses.