22 de julio 2016 - 00:00

“Las monjas deben pedir perdón por el error cometido”

El titular de la Comisión Episcopal de Comunicación habló del caso López y dijo que la Iglesia no puede desligarse de la responsabilidad.

Investigación. Monseñor Santiago Olivera aseguró que la pesquisa de la Iglesia será comunicada al papa Francisco.
Investigación. Monseñor Santiago Olivera aseguró que la pesquisa de la Iglesia será comunicada al papa Francisco.
 La Iglesia, que comenzó una investigación propia sobre lo sucedido en el Monasterio donde el exfuncionario K José López intentó ocultar u$s 9 millones, asegura que todo lo que descubra llegará al Vaticano.

Ayer, la Agencia Informativa Católica Argentina, difundió una entrevista publicada en el Vatican insider, que da a conocer noticias de la Santa Sede, donde el presidente de la Comisión de Comunicación Social, obispo de Cruz del Eje (provincia de Córdoba) monseñor Santiago Olivera, manifestó la sorpresa y preocupación que les provocó el epidosio.

El sacerdote dio también su opinión y aseguró que era raro que las monjas abrieran la puerta del Monasterio en la madrugada.

"Primero nos enteramos de las bolsas y parecía que las monjas no tenían mucho que ver. Pero resultaba raro que ellas le hayan abierto a alguien a las tres de la mañana, sobre todo si se trata de personas que querían ser religiosas de clausura. Es raro que alguien quiera dar una limosna a esa hora, es muy poco prudente de la persona y de las hermanas", consideró monseñor Olivera y explicó que "luego se sumaron las contradicciones, cuando apareció un video de las hermanas ayudando a López a entrar las valijas a su casa, con un arma junto a los bolsos".

"Ellas deberían públicamente pedir perdón por su torpeza, por su ingenuidad y, si existe culpa, por esa culpa", estimó el obispo, pero explicó que las "Monjas Orantes y Penitentes de Nuestra Señora de Fátima"conforman una asociación privada de fieles. "Estrictamente no son monjas, pero acá en la Argentina a todas las religiosas le decimos monjas aunque no lo son" y que "para convertirse en monasterio necesitan el permiso de la Santa Sede, que no tienen, obviamente. Pero son parte de la Iglesia. El anterior obispo Rubén Di Monte las fundó y celebraba ahí la misa, por eso pienso que debemos hacernos cargo, que asumamos la responsabilidad, que no digamos una cosa por otra. Decir que no son monjas podría parecer que nos deslindamos, pero la arquidiócesis no puede hacerlo".

Sobre las situación de las religiosas y la investigación que se inició, el sacerdote dijo que "penalmente están imputadas, porque podrían haber favorecido los actos de este señor que quiso esconder en ese lugar donde debía ser enterrado el obispo o un lugar para guardar dinero, con muchas cámaras. Supongo que tratarán de descubrir si cumplieron los motivos para los cuales fue fundada la asociación privada de fieles o se desviaron y cayeron en la tentación".

Olivera dijo también que todo lo que la Iglesia descubra llegará al Vaticano y que el papa Francisco " conoce muy bien nuestra realidad argentina, conoce la situación y a las personas implicadas" que conocía al arzobispo fallecido Di Monte, quien hizo construir el monasterio y que "eso lo toca muy de cerca, pero no le impedirá actuar como pastor de la Iglesia universal e iluminar lo que deba iluminar. Es un buen camino el haber nombrado a dos sacerdotes que investiguen, que dialoguen e informen sobre las conclusiones.

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