10 de enero 2013 - 00:00

¿Macri y la gran Néstor?: boleta PRO de intendentes

Mauricio Macri
Mauricio Macri
Mauricio Macri ordenó la semana pasada durante un encierro bonaerense en Cariló bancar las candidaturas a diputados nacionales del economista Carlos Melconian y del ministro Guillermo Montenegro. A una semana de ese evento, el principal detractor de esas postulaciones, el primer intendente PRO en la historia, Jorge Macri, encabezará en Mar del Plata una minicumbre de jefes comunales junto al radical Gustavo Posse (San Isidro) y al peronista Jesús Cariglino (Malvinas Argentinas). El escenario: el hotel Sasso del gremio de trabajadores gastronómicos que lidera Luis Barrionuevo.

El encuentro fue convocado por la línea UCR del macrismo, PROA (Propuesta Radical para Otra Argentina), que conduce el presidente de Boca Juniors, Daniel «Tano» Angelici. Pero la logística será aportada por Macri primo, quien hoy llegará a la ciudad balnearia. El intendente PRO de Vicente López se reunió el lunes pasado a solas con su primo en la Capital Federal en un ambiente distendido. Reconoció al ministro de Gobierno porteño, Emilio Monzó, como el armador oficial de la provincia de Buenos Aires. Y desestimó cualquier malestar con el funcionario, con quien compartió mesa en la cena de fin de año del PRO bonaerense junto a Humberto Schiavoni, el mismísimo Macri y el ministro de Hacienda, Néstor Grindetti. Además, justificó su ausencia en el encierro de Cariló, ya que ese día tenía la inauguración de la colonia de vacaciones de su municipio para 1.500 niños.

La noche del jueves pasado, incluso entrada la madrugada del viernes, el parador Divisadero de Cariló fue el escenario de un ejercicio de catarsis colectiva del macrismo. Allí el jefe de Gobierno porteño dejó abierta la posibilidad de ser candidato a diputado por la provincia de Buenos Aires «sólo en un caso de gravedad institucional o caos social». Un criterio laxo sobre el que nadie atinó a pedir precisiones. Sin embargo, trascendieron algunos detalles de ese plan B, en caso de que no repunten las protocandidaturas de Montenegro y Melconian. Si Macri se siente forzado a salir a jugar en persona en las elecciones legislativas de octubre ante una eventual candidatura de otro intendente como Sergio Massa (Tigre) por el peronismo oficialista y/u opositor, el alcalde capitalino apuesta a blindar la boleta PRO con otros jefes comunales con manejo propio de territorio, como sus aliados Cariglino y Posse. Un dato perturba esos planes: el primo Jorge le dejó en claro que no abandonará ni pedirá licencia en la intendencia de Vicente López para saltar al Honorable Congreso de la Nación. Para ocupar ese vacío se acerca al PRO-peronismo la figura de Martín Redrado.

Son los primeros datos que se filtran del plan ideado por Jorge Triaca, la candidatura -testimonial o no- de Macri a diputado nacional, acompañado por intendentes radicales y peronistas que relegitimen su gestión en la provincia de Buenos Aires a través del voto popular, casi un déjà vu de 2009. En aquellos comicios legislativos, Néstor Kirchner fue candidato junto a Daniel Scioli, Florencio Randazzo y Massa, entre otros. El experimento testimonial del Frente para la Victoria salió mal, crisis de las retenciones móviles de por medio, y Unión-PRO se impuso con Francisco de Narváez y Felipe Solá como candidatos.

Por lo pronto, los intendentes Macri, Posse y Cariglino estarán mañana en Mar del Plata para encabezar un congreso que tiene como lema «Gestionando el municipio para gestionar la provincia».

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