Guillermo Coppola sobre la agonía que sufrió Diego Maradona antes de morir: "Si realmente fue así, es terrible"

Coppola lamentó que hayan "dejado morir", y si bien afirmó que "es feo" hablar "de lejos", se preguntó "dónde estaban" aquellos que "decían quererlo". Mientras tanto, la Justicia avanza con el juicio para determinar la responsabilidad del entorno del 10 sobre su muerte.

Diego Maradona y Guillermo Coppola en uno de sus últimos encuentros.

Guillermo Coppola, el ex representante de Diego Maradona, habló sobre el juicio, el fallecimiento, su entorno, la vida juntos y remarcó que, si el futbolista sufrió una agonía antes de morir, "es terrible".

El mediático contó que con Maradona vivieron "un gran amor" y que para el futbolista "el bien más preciado era la pelota y yo era la pelota de su vida. Su pierna izquierda, su vida, su todo".

Coppola también recordó otras complicaciones de salud que sufrió el jugador a lo largo de su vida. En este sentido, el exrepresentante aseguró que en Punta del Este a Maradona "le salvaron la vida". En el 2000 fue internado de urgencia en el país vecino por un cuadro de "arritmia ventricular e hipertensión arterial". Maradona estuvo al borde de morir en aquella oportunidad, pero fue salvado.

Guillermo Coppola habló sobre la muerte de Diego Maradona

Coppola se refirió a los últimos días del 10 y lamentó que lo hayan "dejado morir". Aunque afirmó que "es feo" hablar "de lejos", también se cuestionó "dónde estaban" aquellos que "decían quererlo".

En este escenario, calificó como "terrible" que lo hayan dejado agonizar durante horas hasta que se confirmó su muerte. "Diego era difícil pero no tonto", enfatizó Coppola respecto a los vaivenes que sufrió su entorno en el último tiempo.

Sobre la relación con su familia, el representante aseguró que Maradona "sufría mucho, el no poder ver a sus hijas por las situaciones en las que se encontraba a veces". Por último, sobre el padecimiento del futbolista, Coppola destacó que "no lo hubiera dejado solo", además de manifestar que "no se hubiera dejado morir".

Un médico de la Clínica Olivos responsabilizó a Leopoldo Luque y Agustina Cosachov por la externación de Diego Maradona

El jefe de la Unidad de Terapia Intensiva de la Clínica Olivos responsabilizó al neurocirujano Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov por el traslado de Diego Armando Maradona a la residencia del barrio cerrado San Andrés, en la localidad bonaerense de Benavídez. En estas últimas semanas, la Justicia comenzó el juicio por la muerte del astro argentino y avanza en la citación de expertos y testigos.

Fuentes judiciales informaron, a la Agencia Noticias Argentinas, que Fernando Villarejo consideró que "debía hacerse otra cosa" luego de que el astro sea intervenido quirúrgicamente por el hematoma subdural. En ese contexto, Villarejo recomendó que Maradona sea atendido en un centro de rehabilitación que cuente con personal multidisciplinario atento a su cuadro de abstinencia. No estaba de acuerdo con una internación domiciliaria.

"No era un paciente para estar en una internación domiciliaria, nosotros hace días lo teníamos internado monitoreado y no creía que había que desinstitucionalizarlo", explicó.

La Justicia analiza la responsabilidad de el neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el enfermero Ricardo Almirón, su jefe, Mariano Perroni, el psicólogo Carlos Díaz, el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna y la coordinadora de la prepaga, Nancy Edith Forlin.

"Tuvo que haber sido una internación domiciliaria, casi como una internación institucional, con un médico cercano, acompañante terapéutico, un estricto control de que el paciente no haga algo que uno no recomienda, como comer y tomar cualquier cosa, automedicarse. Eso es muy difícil de controlar en un ambiente domiciliario", analizó el médico de la Clínica Olivos sobre el tratamiento de Maradona.

En el juicio por la muerte del astro futbolístico mundial, Villarejo declaró también que Maradona fue intervenido sin que se le hayan hecho los estudios de riesgo quirúrgico previos. El jefe de la terapia intensiva de la Clínica Olivos también afirmó que el futbolista estuvo "sedado durante 24 horas" porque Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov se lo "pidieron". "Lo hice en total desacuerdo", confesó.