El controvertido fiscal José María Campagnoli logró ayer obtener un paraguas protector ante el intento del juez Jorge Urso de detenerlo. Ayer, la Cámara del Crimen le concedió un hábeas corpus que impide al juez pueda detenerlo u ordenar su comparencia por la fuerza.
El contenido al que quiere acceder es exclusivo para suscriptores.
Los integrantes de la Sala I de la Cámara, Laura Garrigós de Rébori, Gustavo Bruzzone y Carlos Elbert, revocaron así la decisión del juez de primera instancia, Ricardo Warley, que había negado el recurso al fiscal, imputado en la causa por la toma piquetera de la Comisaría 24ª de La Boca.
Los jueces destacaron que la condición de magistrado de la Nación que reviste Campagnoli deja sin efecto la disposición de Urso «en cuanto estableció el apercibimiento de ordenar la inmediata detención en caso de injustificada incomparecencia» a una próxima citación a declaración indagatoria.
Según los camaristas, la orden del juez federal resultaba « manifiestamente violatoria de garantías constitucionales y leyes federales». Urso citó ya cuatro veces al fiscal como imputado por el presunto delito de desobediencia de una orden judicial de la jueza de instrucción María Angélica Crotto, que dispuso el desalojo de la seccional policial copada por piqueteros.
Aunque Campagnoli se aseguró el triunfo en una batalla, la guerra judicial todavía no está definida: Urso tiene decidido pedir el enjuiciamiento político de los fiscales de la Cámara del Crimen Norberto Quantín -secretario de Seguridad en el momento de la toma- y de Campagnoli.
Para activar este mecanismo, el juez federal tiene pensado acudir al jefe de los fiscales, Esteban Righi, quien deberá poner en ejercicio a su flamante Tribunal Evaluador que decidirá si cabe el desafuero de los ex funcionarios de Gustavo Béliz.
Dejá tu comentario