El bloque de Unión por la Patria en Diputados se sacudió, como todo el peronismo, por la condena a Cristina Kirchner. La centralidad de la expresidenta en la última semana y el llamado a la unidad repercutió también en el Congreso.
El PJ en Diputados: oposición recargada, más protagonismo de Máximo Kirchner y expectativas por candidaturas
Desde que se conoció el fallo contra Cristina Kirchner, el líder de La Cámpora se convirtió en su vocero. Si bien suena como posible candidato en la Provincia tras la inhabilitación de su madre, hoy, su lugar de injerencia es el Congreso. Allí, mueve los hilos de una porción importante del bloque de Unión por la Patria, por lo que se podría convertir en el terreno para "resistir" a Javier Milei.
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Máximo Kirchner podría ser candidato en la Provincia o "resistir" en el Congreso.
Un nuevo escenario en el cual cobró mayor protagonismo Máximo Kirchner, pero donde también tienen relevancia sectores como el Frente Renovador, Patria Grande o bien los gobernadores, con legisladores nacionales que les responden directamente.
Una radiografía del bloque de Diputados, que comanda el santafesino Germán Martínez, y los movimientos que se avecinan. ¿Mayor injerencia de La Cámpora? ¿Mayor apertura? ¿Posibilidades de sostener la unidad? Son interrogantes que flotan en estos días. Sí parece claro que, como hasta aquí, Unión por la Patria en Diputados se ha mostrado casi sin fisuras como un espacio opositor a Javier Milei. Y todo indica que así seguirá siendo.
La "resistencia" desde Diputados
Más allá de lo que decida Máximo Kirchner –dar el salto a la legislatura bonaerense o quedarse en el Congreso Nacional—el dirigente de La Cámpora, con bajo perfil, mueve los hilos de una porción del bloque de diputados que integra.
Se trata del mismo bloque que supo presidir hasta que Alberto Fernández avanzó en el acuerdo con el FMI. En aquel verano de 2022, Kirchner dejó la presidencia de la bancada en manos de Germán Martínez quien, al día de hoy, lleva la batuta de la bancada que, con 98 integrantes es, por lejos, la primera minoría en la Cámara baja. Martínez no la tiene fácil. El santafesino, del riñón de Agustín Rossi, tiene que hacer equilibrio en un bloque que es tan amplio como heterogéneo.
Así las cosas, si Máximo Kirchner se apresta a ganar volumen político desde la Cámara baja, o replegarse en Diputados y, desde allí, “resistir” los próximos dos años, la tiene difícil. Por lo bajo, más de un diputado expresa su “hartazgo” por quedar envuelto en las discusiones del AMBA (en especial la interna con el gobernador Axel Kicillof).
Eso se vio, por caso, cuando se impulsaron los nombres para la AGN. Por la injerencia de “la cúpula del peronismo” el candidato que iba a impulsar el bloque de Unión por la Patria era el del amigo de Kirchner, Juan Ignacio Forlón. La noticia generó el descontento de más de un diputado, que decidió pegar el faltazo; la sesión naufragó por falta de quórum.
Según trascendió en aquellos días de mayo de este año, a más de un legislador no le cayó en gracia que el candidato fuera hombre y reclamaron que fuese alguien del interior del país. No titubearon en hacer trastabillar la jugada que algunos le adjudican a la mismísima Cristina Kirchner.
Radiografía del bloque de UP
Pero más allá de los diputados que no quieren ser “llevados de las narices” por La Cámpora y Cristina Kirchner, en el bloque de UP conviven diferentes tribus, con todo lo que ello implica.
De los 98 diputados de Unión por la Patria, apenas 14 son de La Cámpora. Además de Kirchner, integran ese grupo Rodolfo Tailhade, Matías Molle, Luciana Potenza, Costanza Alonso, Rogelio Iparraguirre, Luana Volnovich, Gabriela Estévez, Christian Zulli, Tomás Ledesma, Leila Chaher, Florencia Carignano, Magalí Mastaler y Paula Penacca.
Hay algunos diputados que se comportan como satélites de esa agrupación, o que en el entorno de Máximo Kirchner consideran como “soldados”. Por caso, Emiliano Estrada o la fueguina Carolina Yutrovic. Hay otros diputados, de extracción sindical, que también se muestran muy cercanos al núcleo kirchnerista, como Sergio Palazzo, Vanesa Siley o “Paco” Manrique.
Otros legisladores que orbitan ese sector podrían ser Lorena Pokoik, Julia Strada o Leopoldo Moreau. También suele mostrarse cercano a la expresidenta Eduardo Valdez. En este sector vale mencionar a Carlos Castagneto, presidente del partido Kolina, referenciado en la senadora y cuñada de Cristina, Alicia Kirchner.
Pero por fuera del núcleo K está, por caso, el Frente Renovador, de Sergio Massa, que reúne 9 diputados. Es cierto que Massa y Kirchner estrecharon vínculos durante el gobierno de Alberto Fernández, pero no siempre comparten la misma agenda.
También está el Frente Patria Grande, de Juan Grabois, que tiene dos diputados propios; o el Movimiento Evita, que ocupa una banca. Incluso están los bonaerenses alineados con Kicillof, como Victoria Tolosa Paz o Daniel Gollán tienen voz y voto en ese espacio.
A esto hay que sumarle los diputados que responde a los gobernadores del PJ, cuyos intereses no siempre coinciden con los de los “Juan sin tierra”, que no tienen jefes provinciales a los cuales responder.
Si hubo algo a lo que apeló la Casa Rosada desde diciembre 2023 es a negociar con los gobernadores, por lo bajo, a cambio de ausencias y votos en el recinto. Por caso, en cada sesión, el accionar de los 4 catamarqueños y los 7 santiagueños que responden a Raúl Jalil y Gerardo Zamora, respectivamente, es siempre una duda.
Es cierto que todos estos sectores —con mayor o menos énfasis— expresaron su apoyo a Cristina Kirchner post detención, y hasta bregan en favor de la unidad. Pero salvo los propios y algunos de los satélites, el resto de los diputados lejos está de dejarse llevar por los lineamientos de La Cámpora a la hora de impulsar la agenda parlamentaria. Y, al momento de definir los lugares en las listas, de seguro pelearán por el suyo.
Tampoco habría que descartar que los dirigentes que representan a las diferentes líneas del peronismo dentro del bloque busquen hacerse un lugar en un partido que los últimos 20 años estuvo dominado por el apellido Kirchner y que, para muchos, Cristina no fue más que un "tapón" que impidió que surjan nuevos liderazgos.
Al no poder ser candidata, la expresidenta ya no cuenta con su principal herramienta para doblegar al resto de los sectores: sus votos.
Máximo elevó el perfil
Desde que se conoció el fallo de la Corte Suprema que ratificó los seis años de prisión para Cristina Kirchner, su hijo y líder de La Cámpora, Máximo, se ubicó en el centro de la escena. El diputado, que se caracteriza por dar pocas entrevistas y mantener perfil bajo, "sumó la pata mediática", y se convirtió en el vocero de la dos veces presidenta. Si bien suena como posible candidato en la provincia de Buenos Aires tras la inhabilitación de su madre, hoy su lugar de injerencia, además del PJ bonaerense que preside, es la Cámara de Diputados. Allí, el legislador nacional mueve los hilos de una porción importante del bloque de Unión por la Patria -principal espacio opositor- por lo que se podría convertir en el terreno para "resistir" y volver al poder, como aventuró la líder del PJ en el mensaje que le envió a la militancia.
En los últimos días, Máximo Kirchner no solo subió su perfil en los medios de comunicación. También, la agrupación que él conduce se cargó al hombro la organización de la movilización de este miércoles en Plaza de Mayo.
La imagen fue llamativa. “Mientras pasaban el audio, se escuchaba el ruido de las palomas”, dijo, sorprendido, un testigo de la movilización, para graficar el silencio con el que la militancia recibió el mensaje de audio de la líder del PJ. “Es la primera vez en la historia de la humanidad que un millón, 700.000 personas, ponele el número que quieras, escuchan un mensaje de audio”, dijeron fuentes muy allegadas a Cristina Kirchner. Y aseguraron: “Lo que se vivió en Plaza de Mayo no se va a volver a repetir”.
Más allá de la demostración de apoyo que recibió Cristina Kirchner en su primer día bajo arresto domiciliario, en su entorno no aventuran cuál será su rol de acá en más. Aunque la movilización (impulsada por su hijo) les da la esperanza de que, más que haber sido corrida de la escena, el fallo de la Corte podría generar el resultado contrario.
“A Cristina hay que analizarla con los hechos y con lo que dice”, resumieron desde su entorno. ¿Será, como estiman algunos dirigentes que se referencian en ella, “la electora” del peronismo? Es decir, quien defina los nombres de los candidatos, como lo hizo con Daniel Scioli, Alberto Fernández o Sergio Massa. “Eso lo sabremos el sábado de cierre de listas”, dijeron quienes la frecuentan.
Vocero y ¿candidato?
Mientras que todavía es un enigma el impacto que tendrá la detención de Cristina Kirchner dentro y fuera del PJ y en el resultado de las elecciones; así como también se desconoce cuál será su rol, en estos días, las miradas se posaron sobre su hijo, Máximo.
“El tiempo de persecución que estamos viviendo lo convierte en un vocero más que central en la vida política de Cristina”, aseveró alguien que lo frecuenta. Dio dos entrevistas televisivas al hilo que “midieron 5 puntos”, resaltaron en La Cámpora. El diputado suele dar muy pocas notas, y de forma espaciada. Algunos comparan su estrategia con las apariciones esporádicas del Indio Solari.
¿Será él el candidato por la tercera sección electoral, luego de que Cristina Kirchner quedara fuera de carrera? Él mismo lo respondió en estos días. “No hay apellidos milagrosos”, dijo. “Cuando uno tiene conducción, como es mi caso, está siempre preparado para asumir los roles que haya”, se explayó, pero aclaró: “Tenemos compañeros que pueden llevar adelante esa candidatura mejor que uno”.
Para algunos dirigentes del PJ, esa jugada sería un "error". Es que al líder de La Cámpora le restan dos años como diputado nacional; consideran que debería quedarse allí. Sobre todo, así lo consideran quienes auguran pésimos resultados electorales en toda la Provincia, con la tercera sección incluida. Es decir, secundar a su madre podría significarle una derrota que podría evitar.
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