23 de mayo 2018 - 22:25

Tarifas: dictamen en Senado pese a paliza de expertos

• FRACASO DEL "ALA POLÍTICA" PRO, AUNQUE SUMÓ CHANCE DE VOLTEAR SESIÓN 30-M
Sólidos argumentos desnudaron la delirante etapa camporista de congelamiento de aumentos. PJ sufrió con el salteño Rodolfo Urtubey. Cristina trabajó ayer sólo un minuto: bajó a la comisión, firmó y se fue.

Comisión. Los senadores de Cambiemos, asistidos por especialistas en energía, no pudieron frenar el dictamen antisuba de tarifas del PJ.
Comisión. Los senadores de Cambiemos, asistidos por especialistas en energía, no pudieron frenar el dictamen antisuba de tarifas del PJ.
Un traspié del "ala política" de Cambiemos -referenciada en el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, entre otros- derivó ayer en la firma del dictamen para frenar los aumentos tarifarios retroactivos a noviembre de 2017, que ya cuenta con el aval de Diputados y que se votará el miércoles próximo en el Senado. Sin embargo, el Gobierno casi logra el objetivo de arañarle el bloque al jefe del PJ, Miguel Pichetto, y apuesta ahora a quebrar legisladores opositores para la sesión del 30-M.

Las operaciones desde Casa Rosada se visualizaron durante la tarde de ayer, a la hora de elaborar los dictámenes. El de mayoría obtuvo la cantidad mínima de firmas con la tardía estampa de Rodolfo Urtubey (PJ-Salta), quien lo hizo en disidencia parcial junto a otros compañeros de bloque: Dalmacio Mera (Catamarca), Carlos Espínola (Corrientes) y Guillermo Snopek (Jujuy).

Por la mañana, Pichetto había dejado clara la disposición para acompañar el dictamen que vino desde la Cámara baja, votada por todo el PJ. Tras la tensa demora de Urtubey, tanto él como Mera, Snopek y Espínola deslizaron vía voceros que solicitarán "profundos cambios al proyecto cuando se trate en el recinto", ya que no están "dispuestos a aprobar la iniciativa tal como vino de Diputados". En esa línea, pidieron "reducción del IVA para bajar las tarifas de manera concreta en beneficio de los usuarios argentinos".

Lo curioso de todo este embrollo que disfruta el Gobierno y que preocupa a Pichetto es que la consideración de los cuatro senadores justicialistas fue planteada inicialmente en Diputados por la propia oposición PJ y luego quitada. En los últimos días, los gobernadores Juan Schiaretti (Córdoba) y Juan Manuel Urtubey (Salta), que tienen excelente relación con Mauricio Macri, hicieron propuestas sobre el IVA que ahora contradicen lo votado en Diputados por sus legisladores. El oficialismo aprovechó el hueco y presentó un dictamen de minoría en ese sentido.

De esta manera, la votación del miércoles próximo plantea un escenario inicial con una mínima ventaja para la oposición pero con un oficialismo envalentonado. Si a Cambiemos se le suman los cuatro senadores justicialistas estará cerca de los -nada despreciables- 30 votos, similar número que saldrá del resto del justicialismo, progresistas silvestres, kirchneristas -ayer Cristina trabajó un minuto: bajó a la comisión, firmó el dictamen y se fue- y peronistas puntanos como Adolfo Rodríguez Saá y María Eugenia Catalfamo. Los 12 legisladores restantes ingresarán en el "loteo mágico" de cara al 30-5.

"Con el proyecto de ellos no van a bajar tarifas porque habrá veto y con el nuestro, sí. Nuestro dictamen coincide con un texto similar presentado por el justicialismo y con propuestas hechas por los gobernadores Urtubey y Schiaretti. Lo importante es que Cambiemos aceptó oír a la oposición y tendrá un costo de responsabilidad fiscal -entre $10.000 M y $20.000 M, contra $75.000 M- ya que la baja de IVA se compensará con una mayor recaudación", reconoció anoche el presidente previsional del Senado, Federico Pinedo (PRO).

De todas maneras, si Cambiemos logra romper la bancada de Pichetto -clave desde que asumió Macri para negociar acuerdos-, se expondrá a una réplica virulenta del PJ y de muchos gobernadores. En juego aparecen, por caso, el pliego de la candidata a procuradora de la Nación, Inés Weinberg de Roca; el Presupuesto 2019 para el último trimestre del año y la ya olvidada reforma electoral que chocó el propio Frigerio -pese a las disparatadas operaciones de sus voceros- a fines de 2016.

Paliza

Durante la continuación del plenario de comisiones en el Senado, la política de congelamiento de tarifas llevada a cabo por el kirchnerismo fue destrozada por distribuidoras y entes reguladores, que además dinamitaron el proyecto que empuja la oposición. Veamos:

Asociación de Distribuidores de Gas (Adigas). La entidad explicó un estudio para personas en situación de vulnerabilidad sobre la base del salario mínimo vital y móvil de 2003, cuando el costo anual por gas natural representaba el 3,78% con tarifas congeladas. Hoy, esa cifra está en 1,58% y llegó a estar en un insignificante 0,5% -en categoría R1- en la era K. De allí la falta de inversión en los últimos años, clave para expandir el sistema y dejar de depender de carísimas importaciones de energía.

Enargas. Desde allí detallaron que el incremento resultante entre la tarifa fijada en diciembre de 2017 y la de abril 2018 es de $2,6 extra por día para la categoría R1 (vulnerable); para residenciales, $8,3; y para comercios, $22,7, respectivamente. Además, advirtieron sobre el compromiso de empresas de retirar reclamos anteriores contra el Estado, situación que podría revertirse.

Enre. Según el ente regulador, la iniciativa agravará la diferencia entre tarifas provinciales y las de la región del Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba), lo que implicará el regreso de los subsidios a favor de Capital Federal y áreas bonaerenses.

Cammesa. En gobiernos kirchneristas y con tarifas congeladas, las empresas provinciales de energía mantuvieron un régimen de deudas que superaba el 40%. En la actualidad, sólo deben un 15%.

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