14 de julio 2006 - 00:00

Se complica ingreso de Brasil a la UE

Productores agropecuarios de la Unión Europea pidieron a la Comisión Europea que se prohíban las compras de productos alimentarios de Brasil por presuntos incumplimientos en los controles.

La productores agrupados en la entidad Copa-Cogeca presentaron al órgano ejecutivo dos informes «irrefutables» emitidos por un grupo de veterinarios de la Oficina Alimentaria y Veterinaria (OAV) de la Unión Europea sobre la agricultura en Brasil.

El pedido lo formalizó el secretario general de Copa-Cogeca, Franz Josef Feiter, en una carta dirigida al comisario europeo de Comercio, Peter Mandelson, en la cual reclama la prohibición «inmediata» de todas las importaciones de productos brasileños hasta que se resuelvan las deficiencias.

Según publican las agencias internacionales, los informes exponen los resultados de dos misiones de la OAV a Brasil, de noviembre y diciembre de 2005, en las cuales identificaron «graves incumplimientos» de las autoridades brasileñas en la gestión de las normas de salud y de seguridad alimentaria establecidas para los productos alimentarios destinados al mercado europeo.

Asimismo, confirman que las autoridades brasileñas competentes «no son capaces de garantizar» el contenido en residuos de la miel exportadaen la actualidad en grandes cantidades por Brasilhacia la UE.

También señalan que algunos aditivos prohibidos en Europa se están utilizando en los alimentos para animales cuyos productos se exportan a la UE. La carne de porcino se exporta ilegalmente a la UE desde el 1 de enero de 2005.

Según la información compilada por noticias agropecuarias.com, el Copa y la Cogeca manifestaron que el sistema de controles establecido por las autoridades brasileñas es deficiente.

Si bien reconocen que las normas de producción de Brasil no son como las utilizadas en Europa, apuntan que estas deficiencias son aún más inaceptables cuando lo que está en juego es la salud de los consumidores europeos.

Feiter indicó también que, según el avance actual de la negociación en la OMC, Europa podría tener que abrir ampliamente sus fronteras a productos que claramente no satisfacen las necesidades de los consumidores.

Entre estas necesidades, destaca las normas europeas en materia de trazabilidad (seguimiento desde el origen hasta que llega al consumidor), seguridad alimentaria, medioambiente o bienestar animal, lo que resulta aún más perjudicial ya que los productores europeos están sufriendo graves distorsiones de competencia.

Dejá tu comentario

Te puede interesar