10 de noviembre 2010 - 00:00

A más campaña, menos leyes a Macri

Mauricio Macri ayer en el Salón Dorado de la Legislatura porteña, durante la distinción a Valeria Lynch como personalidad destacada de la cultura.
Mauricio Macri ayer en el Salón Dorado de la Legislatura porteña, durante la distinción a Valeria Lynch como personalidad destacada de la cultura.
Casi conforme dejó el macrismo al Gobierno porteño cuando le prometió, esta semana, que al menos el presupuesto 2011 lo aprobarán antes de fin de año en la Legislatura, aún con varios recortes.

Por lo demás no hubo promesas el lunes cuando la mesa chica del PRO se entrevistó con el jefe de gabinete Horacio Rodríguez Larreta para hacer un repaso de la agenda de proyectos que Mauricio Macri buscaría sancionar antes de terminar 2010.

Ni siquiera, cree el PRO, que la aprobación mañana de una norma a propuesta de los taxistas -un delegado es integrante del bloque peronista en la Legislatura- podría ablandar algo a sus rivales en la pretemporada electoral que cobra energía en la ciudad de Buenos Aires. Esa norma impondría a las empresas de radio taxis contar con una flota mínima para poder inscribirse como tal.

Entre las propuestas que recibió el PRO para intentar reunir votos en el recinto, está por ejemplo la del convenio ya firmado por Macri hace más de cinco meses con Solares de Santa María para el desarrollo de un ambicioso proyecto urbanístico en lo que fuera la Ciudad Deportiva de Boca Juniors. Pero esa iniciativa requiere de cambios en el Código de Planeamiento Urbano, por lo que necesita de mayoría especial para ser aprobada, cuarenta votos, cuando el oficialismo porteño sólo retiene 24. Casi todas las leyes que necesitan de ese número de votantes ya son resignadas por el PRO. Prácticamente el de los Solares de Santa María es el proyecto más importante -después del Presupuesto 2011- que busca Macri en una magra agenda de ambiciones legislativas para lo que resta de actividad hasta las fiestas navideñas previas al receso de verano. Por eso el Gobierno porteño hasta se olvidaría, por ejemplo, de tratar el viejo y mentado proyecto conocido como «bajo autopistas» para dar en concesión espacios que se encuentran debajo de las vías rápidas y que el PRO viene hace meses intentando ingresar al temario de asuntos a tratar en las sesiones ordinarias. Sin embargo el titular de la bancada, Cristian Ritondo, buscará hoy en reuniones con los jefes de los bloques opositores aún darle impulso y someterlo a votación, como un plus para Macri este año. Otra norma que podría sancionarse es la que propone el macrismo para grabar al menos 10 autopartes con el dominio o número de chasis del automóvil como modo de prevenir robos para su posterior venta en desarmaderos, que contará con votos a favor de la oposición al PRO.

Nada habrá en lo referente a materia electoral que termine de cerrar la pista sobre la fecha de las urnas venideras, en medio de la polémica por los dichos del jefe de Gobierno porteño quien admitió que le gustaría unificar los comicios nacionales con las locales. Esos temas que se refieren a su candidatura, Macri los pospuso hasta marzo del año que viene, al menos como idea en estos días en que lo dominan los preparativos de su nuevo casamiento que se celebrará el próximo martes.

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