Camioneros fue uno de los primeros gremios en reclamar un bono de fin de año. Si bien es habitual este tipo de planteos, desde 2011 Moyano elevó el tono al compás de su ruptura con el Gobierno. El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, había advertido que el Ejecutivo no avalaría ese tipo de negociaciones. Mientras desde el Ministerio de Trabajo, que conduce Carlos Tomada, sostuvieron que esa clase de reclamos seguiría la lógica del resto de las negociaciones: es decir, que dependería del margen económico de cada actividad.
Los adicionales de fin de año comenzaron a instalarse como demanda en las últimas semanas. Además de Camioneros, adelantaron reclamos de esas características desde la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA), la Asociación Obrera Textil (AOT), el Sindicato de la Alimentación, los gremios portuarios y hasta los de servicios, como el de Comercio, de Armando Cavalieri. También lo hizo el Sindicato de Trabajadores de Peajes (SUTPA), que conduce Facundo Moyano, quien exigió el pago de $ 4.000 en dos cuotas de 2.000 pesos.
Hugo Moyano se mantuvo expectante luego de las elecciones, en las que obtuvo la renovación de su banca de diputado nacional para el canillita Omar Plaini, uno de sus principales colaboradores en la CGT opositora, y se asoció a la resonante victoria en Neuquén del petrolero Guillermo Pereyra, que será senador nacional por esa provincia. Sin embargo, en el plano gremial se retiró momentáneamente e incluso eludió participar de una manifestación convocada por la CTA disidente, del estatal Pablo Micheli.
En el gremio comentaron que hoy darán a conocer la planificación para las medidas de fuerza. Y no descartaron un paro nacional para esta semana en todas las ramas de la actividad del transporte.
"Mañana (por hoy) arrancan las asambleas. Los empresarios dicen que no pueden negociar porque Trabajo les avisó que no iba a homologar acuerdos por adicionales", se quejó Marcelo Aparicio, secretario gremial de Camioneros.
Mariano Martín |
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