Blindan Catamarca por temor a un escrache contra la Presidente

Cristina de Kirchner

Cristina de Kirchner evitará en su visita de esta tarde a Catamarca los traslados terrestres. El clima de violencia política que marcó el inicio de la campaña electoral, con escraches el jefe de los diputados kirchneristas Agustín Rossi y al jefe de Gabinete bonaerense, el peronista Alberto Pérez, obligó a la comitiva presidencial a extremar los recaudos para la recorrida de la Presidente en Catamarca.
El gobernador de la UCR cobista, Eduardo Brizuela del Moral, dispuso junto al Ministerio del Interior un estricto operativo de seguridad que incluye a 300 efectivos de la Gendarmería. Pero además la Presidente realizará todos sus traslados en helicóptero, para eludir así eventuales piquetes y protestas al costado de las rutas y caminos catamarqueños.
El clima político en Catamarca, provincia que abre el calendario electoral 2009, está enrarecido. Además de Cristina de Kirchner visitará hoy también la provincia Alberto Rodríguez Saá, quien apoya la candidatura a diputada provincial de Liliana Barrionuevo, la hermana de Luis, el gremialista gastronómico que lidera la CGT disidente y sueña con una candidatura presidencial de Eduardo Duhalde.
Con el ex cuñado presidencial Armando «Bombón» Mercado como principal anfitrión PJ de la presidente Kirchner, el peronismo catamarqueño se encuentra forzadamente unido para enfrentar en las elecciones locales del 8 de marzo al Frente Cívico de Brizuela del Moral. Pese a su discurso opositor, Barrionuevo colocó al tope de la lista kirchnerista a un dirigente de su sector, Hugo Argerich, pero también conformó otra lista anti-K con su hermana como primera candidata y con el apoyo de Otro País es Posible, de los hermanos Rodríguez Saá.
En 2003, Cristina de Kirchner había sufrido como senadora una agresiva manifestación, con huevazos
incluidos, cuando acompañó al entonces presidente Néstor Kirchner a Catamarca. Los incidentes fueron atribuidos al peronismo disidente que Barrionuevo encabeza en la provincia. Ahora, una nueva escalada entre el Gobierno y la dirigencia agropecuaria hace temer posibles incidentes en la visita institucional que realizará hoy la Presidente.
El aeropuerto catamarqueño está separado de la capital provincial por unos 15 kilómetros. Cuando Kirchner visitó Catamarca, una larga caravana de vehículos oficiales trasladó al jefe de Estado hasta el centro de la ciudad. Pero en el caso de Cristina de Kirchner el traslado se realizará en helicóptero para evitar anunciadas protestas del cordón industrial que bordea el camino que lleva del aeropuerto a la Casa de Gobierno.
La jefa de Estado arribará a la provincia para inaugurar la Escuela Nueva 257 en el distrito Capital y poner en marcha un tramo vial de la avenida Circunvalación sobre la Ruta Nacional 38, en el departamento Valle Viejo. Estará acompañada en todos los actos por Brizuela del Moral, un radical que transitó fugazmente el sendero de la Concertación Plural junto a otros ex radicales K, como Julio Cobos, pero que hoy retomó una férrea oposición al Gobierno nacional.
El primer acto comenzará a las 19:30 y la Presidente estará acompañada por el ministro de Educación de la Nación, Juan Carlos Tedesco. Cristina de Kirchner también firmará un convenio para el inicio de la construcción de unas 4 mil viviendas, trabajos de refacción en la Ruta 40 y mejoras en un edificio del servicio penitenciario catamarqueño. Los anuncios rondan la suma de $ 700 millones.
El próximo 8 de marzo habrá elecciones en Catamarca para renovar legisladores locales, y el gobernador Brizuela del Moral, que se encuentra aliado al vicepresidente Cobos, tendrá un duelo directo con el kirchnerismo.
Precisamente por tratarse de las primeras elecciones del año, el escenario catamarqueño será el campo de experimentación en el que el titular del PJ, Néstor Kirchner, y Cobos medirán fuerzas de cara a los comicios legislativos nacionales de octubre y jugarán una fuerte apuesta electoral que repercutirá en sus aspiraciones políticas para lo que quede del año.
De hecho, Cobos ya comprometió su visita a Catamarca para participar del cierre de campaña legislativa del oficialista Frente Cívico y Social en la primera semana de marzo.
Kirchner convocó a la unidad de los principales referentes justicialistas locales para derrotar al Frente Cívico y Social; conviven allí, junto a los kirchneristas, representantes de Barrionuevo y hasta del senador Ramón Saadi.
El caso de Saadi es particular: alineado en un principio con el peronismo potrerista de los Rodríguez Saá, este peronista catamarqueño terminó apoyando a la Casa Rosada en la crucial votación sobre retenciones móviles que volteó Cobos en el Senado. Ahora, y tras el éxodo de Carlos Reutemann y Juan Carlos Romero del bloque oficialista en la Cámara alta, Saadi evalúa nuevamente abandonar el kirchnerismo en el Congreso pese a apoyar la lista oficialista en los comicios locales de su provincia.