19 de marzo 2013 - 00:00

Denuncian por lavado de dinero y evasión al Hsbc

El Gobierno denunció al banco HSBC por lavado de dinero por $ 392 millones y, por evasión fiscal en sólo seis meses, por $ 224 millones, a través de cuentas que no eran informadas al Estado y facturas "truchas". La denuncia fue presentada ante la Justicia el 4 de febrero, pero el titular de AFIP, Ricardo Echegaray, recién la hizo pública ayer en rueda de prensa.

El funcionario explicó que tras realizarse una serie de allanamientos, el organismo recaudador detectó "facturas apócrifas para blanquear dinero y maniobras fraudulentas con las que se evadían impuestos" por varias decenas de millones de pesos. Según Echegaray, del análisis de seis meses de documentos se desprende que el banco, con su sede central en Londres, lavó dinero por unos $ 392 millones y evadió impuestos por $ 224 millones. Por ello, aclaró: "El reclamo judicial final del Estado habrá que verlo con el avance de la causa".

Facturas


El administrador federal dijo que el banco HSBC le brindaba a empresas involucradas en maniobras de facturas apócrifas -usuarias y emisoras- un servicio consistente en efectuar depósitos de sus cobranzas, producto de operaciones inexistentes. Esos cobros -según la AFIP- se concretaban en una cuenta asociada a una genérica, exenta del impuesto sobre los débitos y créditos en cuentas bancarias y cuyos movimientos eran "ocultados deliberadamente".

"Las empresas involucradas en estas maniobras son Red de Multiservicios SA, Más Distribuidora SA y Recaudaciones y Servicios del Sur SRL, quienes a través del HSBC urdieron maniobras de evasión y lavado de dinero, con un CUIT genérico, jamás informado por la entidad bancaria a la AFIP, para llevar adelante esta serie de irregularidades", detalló Echegaray.

Además, fueron halladas operaciones irregulares con el objetivo de fugar divisas del país por parte de la Sociedad de Bolsa del interior Epsilon, agregó la AFIP. Para llevar adelante operaciones de contado con liquidación, Epsilon utilizó "firmas fantasmas o sociedades pantallas, sin contenido económico real, y que sólo fueron creadas para ser utilizadas como vehículo de salida de dinero del país de manera irregular".

Echegaray concluyó que "es necesario implementar un marco regulatorio que dote de transparencia y equilibrio a estas operaciones cambiarias, desarrollando herramientas de compatibilización del sistema fiscal a los efectos de prevenir el desarrollo de estas conductas defraudatorias, tanto de entidades financieras y cambiarias -en particular casas de cambio y agencias de turismo y viajes- como de particulares".

El mes pasado, el presidente ejecutivo de HSBC, Stuart Gulliver, reconoció en Inglaterra que la compleja estructura y la amplia extensión territorial del banco lo volvía atractivo para el lavado de dinero.

En 2011, HSBC inició una reestructuración que incluyó la centralización del control de operaciones regionales, en busca de evitar escándalos, como el que lo llevó a pagar en diciembre pasado la mayor multa que nunca pagó un banco.

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