Escuchas: PRO, contra otro juez

Martín Borrelli

La comisión investigadora del caso escuchas, en la Legislatura porteña, aprobó ayer una medida polémica para que los testigos que cite estén obligados a concurrir. Tras el trámite que el viernes pasado realizaron el titular de la comisión, Martín Hourest, y la secretaria Gabriela Cerruti, el juez porteño Roberto Gallardo determinó que podrá utilizarse la fuerza pública para asegurarse las presencias. Hasta ahora, ninguno de los testigos citados (más de 20) se presentó, entre ellos, el fiscal general Germán Garavano y ex funcionarios del Gobierno porteño.

Ayer, la comisión votó a favor de esa medida judicial, a lo cual el PRO no sólo se opuso, sino que acusó a la oposición.

«Antes fue Oyarbide, ahora es Gallardo. Cambian los nombres de los jueces. Lo que no cambia es la desesperación de la oposición por desgastar a Macri, sin reparar en las formas», se quejó el macrista Martín Borrelli, mientras la oposición acusa al oficialismo de querer vaciar la comisión.

Ayer, ante la ausencia de testigos, los legisladores sólo mantuvieron una breve reunión.

Para Fernando Sánchez, de la Coalición Cívica, el testigo clave es Agustín Gamboa, titular de Política Criminal del Ministerio Público fiscal porteño, quien en la causa aseguró haberse reunido con el espía Ciro James en dependencias del Ministerio de Seguridad. Se lo habrían presentado como integrante de la Policía, pero formalmente nunca ingresó a la fuerza y en ese momento figuraba como asesor del Ministerio de Educación porteño.