En los primeros 11 minutos el Merval trepaba un 2,81%, a los 19 lo acotaba al 1,57%, media hora después de las 14 subía el 7,16% -al 0,63% del máximo histórico intradiario-, y al cierre se estacionaba en 12.333,07 puntos, avanzando el 5,46%. Esto no es el reflejo del comportamiento irracional de los inversores sino de los tiempos que corren, donde parecen dominar los vaivenes de los candidatos, o más precisamente el eventual resultado de las próximas presidenciales. Si los actores del mercado fuesen honrados y coherentes con sus posiciones políticas -tras el cambio de expectativas del último fin de semana- deberíamos ver a quienes venían apostando y manifestándose "oficialistas" vendiendo sus tenencias bursátiles de manera ordenada, en tanto los que se jugaban por el cambio deberían incrementarlas y mantenerlas, lo que no debiera introducir mayor volatilidad. Pero como el sistema es oportunista, sin ningún empacho los partidarios del viejo "status quo" se han transfugado, viendo cómo deshacerse de "los lastres" y acomodarse al que llega, incrementando el volumen del "trading" y por ende la volatilidad del mercado (tradicionalmente la volatilidad aumenta a medida que nos acercamos a un acto eleccionario, pero esta vez disminuyó). En una jornada en que se negociaron 64 papeles en alza frente a 5 en baja y 2 sin cambio, alcanzando los $ 572 millones operados (apenas $ 4 millones debajo del récord histórico nominal del 11/02/08 ), lo mejor ayer pasó por las constructoras (+12,2%, Caputo el 19,5%), los bancos (11% arriba, el Macro un 13,3%), gasíferas (+8,6%), metalúrgicas (+8,6%), etc. y hacia el final las eléctricas (+6,4%), inmobiliarias (+5,8%) y petroleras (+5% si bien el crudo subió el 6,41%, YPF un 7% y PESA el 11%). Mientras los papeles argentinos (M.Ar) sumaron el 7,8% los extranjeros ganaron un 1,79%.
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