8 de julio 2006 - 00:00

Bush pidió mantener un país "competitivo" con "bajos impuestos"

Los habitantes de Estados Unidos están "viviendo momentos de gran esperanza y de gran oportunidad" económica, y si quieren que siga así deben apoyar las políticas de recortes de impuestos y un país que sea competitivo y abierto a la inmigración, dijo ayer el presidente George W.Bush.

"Si mantenemos bajos nuestros impuestos, si mantenemos competitivo a nuestro país y si mantenemos a esta nación acogedora, contribuiremos a nuestra prosperidad y crearemos un mejor Estados Unidos para generaciones futuras", dijo Bush durante su habitual discurso radial de los sábados.

El gobierno del presidente Bush está disfrutando en los últimos meses algunos indicadores económicos favorables, lo cual -sin embargo- no alcanzó todavía para elevar sus índices de popularidad, que están por debajo de l 40 por ciento según las encuestas.

Con las elecciones legislativas de noviembre cada vez más presentes en el escenario político norteamericano, Bush buscó hoy destacar los logros económicos de su administración.

"El viernes supimos que la economía estadounidense creó 121.000 nuevos empleos en junio y ha creado más de 5,4 millones de empleos desde agosto del 2003", dijo el mandatario, quien destacó que en el primer trimestre del 2006 "nuestra economía creció a una tasa anual impresionante del 5,6 por ciento".

La economía "también está prosperando porque Estados Unidos sigue siendo la nación más innovadora del mundo", dijo Bush, según el cual "detrás de cada una de estas estadísticas positivas hay un sin fin de historias", como las de los "trabajadores que comienzan cada día con esperanza puesto que tienen un empleo que les ayudará a forjar una mejor vida", afirmó.

Más allá de la referencia a la necesidad de mantener a Estados Unidos un país "acogedor", Bush no hizo en su discurso de ayer otras menciones al asunto de la inmigración.

Pero el tema fue parte de varios de sus mensajes de la semana que concluye, durante la cual el presidente insistió en reclamar apoyo para su proyecto de trabajadores "invitados" y rechazó una vez más tanto una amnistía como una deportación masiva de los cerca de doce millones de indocumentados que viven en este país.

Dejá tu comentario

Te puede interesar