27 de diciembre 2006 - 00:00

"Subiré a la horca como un mártir"

Saddam Hussein
Saddam Hussein
Saddam Hussein afirmó que morirá "como mártir" y llamó a la unidad del pueblo iraquí frente a los "enemigos", en una carta conocida hoy, un día después de confirmarse su condena a muerte que según Bagdad demorará "un poco de tiempo" en ejecutarse.

"Me ofrezco como mártir. Si Dios quiere, ordenará ponerme junto a los mártires y a los verdaderos hombres. Si mi alma sigue este camino, irá ante Dios con serenidad", sostiene Saddam en una carta dirigida al "pueblo iraquí".

El mensaje fue certificado por los abogados defensores de Saddam, que tienen su base en Jordania.

"Los enemigos de su país, los invasores y los persas encuentran una barrera en la unidad entre ustedes y sus dirigentes.

Por eso, intentan sembrar el odio entre ustedes", dice el ex mandatario, derrocado en abril de 2003.

"Oh valientes y devotos iraquíes en la heroica resistencia. Oh hijos de una nación, dirijan su enemistad hacia los invasores.

Les pido que no odien a los pueblos de estos gobiernos que nos han atacado. Larga vida a Irak, a Palestina, a la jihad a los mujahidines que luchan contra los invasores. Dios es grande. Que él maldiga a los miserables", expresa la carta.

La Corte de Apelaciones iraquí ratificó el martes la preanunciada condena a muerte para Hussein, acusado de ser responsable del asesinato de 148 personas en la ciudad chiita de Dujail, en 1982.

Mientras tanto, el ministro de Justicia iraquí, Heshem al-Shibli, afirmó hoy que demandará "un poco de tiempo" para que Hussein sea ajusticiado.

"El decreto de la corte de apelación debe ser transmitido a la presidencia. El decreto presidencial firmado será luego enviado a la dirección nacional de la prisión, que luego será encargada de aplicar la sentencia", explicó Shibli.

"Todo ésto podría demandar un poco de tiempo a causa de la fiesta del Eid El Adha (la fiesta musulmana del sacrificio que comienza el 30 de diciembre)", indicó.

En tanto, la Federación Internacional de las Leyes de los Derechos del Hombre (FIDH) y la Unión Europea se declararon hoy en contra de la pena de muerte y de la decisión de la corte de apelación iraquí de ajusticiar a Hussein.

La FIDH pidió a los dirigentes iraquíes que no ratifiquen la decisión de llevar a la horca a Saddam.

La organización, que dijo estar en contra "de la pena de muerte bajo cualquier circunstancia y en cualquier lugar", se dirigió al presidente iraquí, Jalal Talabani, para pedir "una moratoria" de la pena de muerte en el país.

La UE se manifestó "en contra de la pena de muerte en cualquier caso y en cualquier país", y "éste principio se aplica también en el caso de Saddam Hussein", dijo un portavoz de la Comisión Europea.

"Este es un principio general de la Unión Europea que se aplica a cualquier individuo en cualquier país", reiteró el vocero.

También India expresó su desacuerdo con la ejecución de Hussein. "Es nuestra esperanza que la sentencia no sea ejecutada y que la vida del ex presidente iraquí sea al final perdonada", afirmó el vocero de la Cancillería india, Navtej Sarna.

"El gobierno de Nueva Delhi espera también que no sean tomados otros pasos que puedan obstaculizar la reconciliación y que retarden el desarrollo del proceso de paz en Irak", añadió el portavoz.

En tanto, el partido Baaz iraquí amenazó hoy con atacar objetivos estadounidenses en todo el mundo en caso de que sea ahorcado su líder.

La amenaza fue lanzada a través de un comunicado de la dirección del partido en el exilio aparecido en uno de los sitios de internet cercanos al grupo, declarado ilegal en el 2003 en Irak.

"El partido Baaz y la resistencia están determinados a recurrir a todos los medios necesarios para golpear los intereses estadounidenses en cada lugar si el gobierno de Washington comete este crimen", dijo la nota.

"Cumplir la condena a muerte contra el presidente Saddam Hussein -prosiguió- hará imposible toda posible apertura a negociaciones entre la resistencia iraquí y las fuerzas ocupantes".

"Matar al presidente y sus compañeros es la más importante línea roja que el gobierno estadounidense no debe superar", dijo el comunicado de Baaz.

"La decisión está en las manos de los estadounidenses. Son ellos -concluyó la nota- quienes deciden todo en Bagdad y no el gobierno fantoche iraquí".

A su vez, Marco Pannella, líder histórico del Partido Radical italiano, comenzó una huelga de hambre y de sed para pedir al gobierno que "se empeñe inmediata y seriamente a fin de evitar la ejecución inmediata de Saddam Hussein".

Pannella, de 76 años, se ofreció además a viajar inmediatamente a Bagdad "y a donde me sea posible para obtener la gracia de la conversión de la pena de muerte para Saddam Hussein en la de 30 años de reclusión".

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