7 de julio 2025 - 17:13

Vicentin: se arma el tablero de oferentes y la definición queda para fin de año

Molinos Agro, Bunge, Viterra y ACA lideran la lista de interesados que presentaron su inscripción para competir en el cramdown. La justicia acelera el proceso para encontrarle nuevo dueño a la agroexportadora.

El concurso de acreedores de Vicentin se convirtió en uno de los más largos y complejos en la historia de la Argentina. 

El concurso de acreedores de Vicentin se convirtió en uno de los más largos y complejos en la historia de la Argentina. 

El concurso preventivo de Vicentin entra en su fase más delicada. Con el cierre del período de inscripción inicial, once empresas confirmaron su intención de participar en el cramdown, el mecanismo que habilita a terceros a proponer un rescate financiero y operativo de la histórica agroexportadora. El objetivo del juez civil y comercial de Reconquista, Fabián Lorenzini, es que todo quede resuelto antes de fin de año, tras casi cinco años de un default que sacudió no solo al campo sino a la política y la economía argentina.

Entre los inscriptos figuran nombres de peso como Molinos Agro, del grupo Pérez Companc; la multinacional Bunge; Viterra y la cooperativa ACA. También aparecen Grassi, el mayor acreedor comercial del concurso; LDC Argentina; Unión Agrícola de Avellaneda; además de Bioenergías Agropecuarias, Yabitel, Barbero Cereales y Atilio Marotte. Cada uno con intereses que van desde quedarse con activos específicos, como las plantas del norte santafesino, hasta controlar la operación completa de la compañía.

Un paso clave tras años de default

El proceso de cramdown se puso en marcha luego de que la Justicia rechazara la propuesta original que Vicentin había presentado junto a un grupo de bancos y traders. Desde fines de 2019, la firma arrastra un pasivo que ronda los u$s1.300 millones, además de una deuda posconcursal estimada en más de u$s30 millones, según el último informe elevado por los interventores judiciales.

Ahora, tras el cierre del registro, comenzará la etapa donde los oferentes deberán consolidar su interés: se espera que abonen un canon para acceder a toda la documentación contable y, más adelante, formulen propuestas concretas para capitalizar la empresa y convencer a los acreedores. Según anticipó Lorenzini, el cronograma incluirá la designación de un evaluador independiente, la presentación de valuaciones, audiencias informativas y, finalmente, la votación que definirá quién se queda con la agroexportadora.

Rechazo a maniobras dilatorias

En paralelo, el juez rechazó un nuevo intento del antiguo directorio de Vicentin, que presentó un recurso para frenar el proceso de salvataje. Lorenzini lo desestimó por “infundado e improcedente”, y advirtió que esas objeciones carecían de fundamentos jurídicos claros. Además recordó que el recurso de queja que tramita ante la Corte Suprema no tiene efecto suspensivo, por lo que el cramdown sigue adelante sin demoras.

Para el magistrado, el interés que despertó el proceso, con once compañías anotadas, la mayoría con fuerte trayectoria en el sector, refuerza la utilidad del esquema de pre-registro que implementó el tribunal. Así busca evitar mayores dilaciones y darle una salida definitiva a un expediente que se convirtió en uno de los concursos más complejos y extensos del país.

Campo granos exporrtación soja barco cosecha.jpg
La expectativa ahora es que en los próximos meses se presenten las ofertas formales y se concrete la votación entre los acreedores.

La expectativa ahora es que en los próximos meses se presenten las ofertas formales y se concrete la votación entre los acreedores.

Expectativa por las ofertas y cierre del proceso

Con el tablero ya delineado, en el mercado anticipan que podrían surgir alianzas entre varios de los inscriptos o incluso nuevas incorporaciones en la etapa definitiva. La mirada está puesta especialmente en cómo jugarán Bunge, Viterra y ACA, un trío que ya fue clave en proyectos conjuntos y que mantiene participación accionaria en Renova, la planta aceitera más grande de Sudamérica.

La expectativa ahora es que en los próximos meses se presenten las ofertas formales y se concrete la votación entre los acreedores, que serán quienes finalmente definan el futuro de Vicentin. Mientras tanto, la compañía sigue operando sus plantas con contratos de fasón que permiten sostener empleos y flujo de caja, a la espera de una resolución que, si se cumple el calendario fijado por el juez, llegará antes de que termine el año.

Dejá tu comentario

Te puede interesar