11 de diciembre 2023 - 00:00

La tecnología como una aliada para la producción sostenible

Este último año confirmó una tendencia que veníamos observando: la inteligencia artificial, la digitalización y la obtención de datos a partir de la tecnología se volvieron herramientas indispensables para el desarrollo de la industria. Esto nos plantea un desafío más profundo asociado a integrar todas estas tecnologías en nuestra gestión.

Cualquiera de estas herramientas por sí solas no hacen la diferencia, quienes le agregar valor son las personas, allí es cuando adquiere relevancia en los procesos y en el uso que hacemos de ellas. En definitiva, el dato mediante la gestión humana nos ayuda a conseguir mayores eficiencias, ser más asertivos en la toma de decisiones y mejorar así nuestra excelencia operacional.

Hoy somos testigos de cómo las distintas industrias están viviendo una transformación asociada a la Industria 4.0, donde la integración de una amplia gama de tecnologías contribuye a mejorar la productividad y la calidad de los productos, revolucionando totalmente la manera en que se investigan, fabrican y comercializan los bienes.

Este nuevo paradigma adquiere cada vez más relevancia porque, entre otras virtudes, impulsa un crecimiento sostenible tanto desde las mejoras en términos de formulaciones, empaques y rapidez de llegada de los productos, como en la capacidad de volver más eficientes los centros productivos. Por ejemplo, medir el consumo de recursos como agua y energía para reducir los costos y cuidar el medio ambiente. Estas dos variantes conjugadas generan industrias más competitivas y nos ayudan a diseñar productos cada vez mejores y más sostenibles en toda su cadena de valor.

Esto se vuelve un activo invaluable frente a una realidad cambiante y a un consumidor cada vez más consciente e informado. Pero esta evolución requiere decisión, aportar a ella y fundamentalmente un cambio de pensamiento: entender a la tecnología como una aliada para dar respuesta a los desafíos que enfrentamos como sociedad.

Los resultados de estos avances para la industria están a la vista: en términos económicos, según el MIT Sloan Management Review , las empresas que han adoptado la transformación digital son un 26% más rentables que sus competidores promedio de la industria y ven una valoración del mercado un 12% más alta.

En esta nueva era que estamos viviendo, no podemos entender a las máquinas disociadas de la capacidad humana que es la que genera valor. Esta transformación implica un desafío muy grande puertas adentro de cada organización, para acompañar y preparar a las personas con nuevas habilidades y conocimientos que permitan capturar todo lo que la tecnología tiene para ofrecernos.

Es difícil predecir qué es lo que vendrá. Nos queda prepararnos, tener la visión de estar siempre un paso adelante, pero si algo queda claro es que no hay manera de aprovechar todo lo que nos ofrecen las nuevas tecnologías sin la mirada, la creatividad y el análisis de nuestros colaboradores. Y aunque la tecnología sea protagonista, las personas son las que están en el centro de la transformación y la hacen posible.

Dejá tu comentario