ver más

Ya superaste el límite de notas leídas.

Registrate gratis para seguir leyendo

30 de septiembre 2025 - 07:00

Por la baja de retenciones, el Gobierno estará obligado a un mayor ajuste si quiere mantener el superávit fiscal

Para compensar el mayor gasto tributario originado por la rebaja impositiva al campo, tendría que terminar el año con un ajuste equivalente a 0,91 puntos del PBI respecto del 2024. Subsidios, salarios y gasto social tendrían que achicarse aún más.

ver más

Para mantener el superávit de este año, después de la eliminación temporaria de retenciones, el Gobierno tiene que profundizar la motosierra.

Ámbito

Así como el Gobierno exige a la oposición que explique cómo se tiene que financiar cada proyecto de ley que implique un incremento en el gasto, desde el punto de vista inverso, se le podría requerir a la Casa Rosada que aplique el mismo criterio cuando autoriza una reducción de impuestos, como en el caso de las retenciones.

El contenido al que quiere acceder es exclusivo para suscriptores.

Se trata, en realidad, de una suba del gasto tributario. Se denomina así a todas las excepciones de pago de ciertos impuestos que benefician a personas o empresas. Se trata de exenciones que están avaladas por una ley general que rige a un impuesto o por mecanismos de promoción, como el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI).

En el caso de la eliminación temporaria de retenciones se trata de un gasto tributario estimado en el 0,23% del PBI para este año. En otras palabras, implica el equivalente a unos u$s1.500 millones que dejaría de percibir el fisco.

Ese costo del Estado nacional es para que una decena de empresas cerealeras le anticipen unos u$s7.000 millones. Hasta ahora el Gobierno no ha dicho cómo va a contrapesar el menor ingresos de recursos, si es que piensa hacerlo.

ajuste-retenciones

Cabe recordar que el proyecto de Ley de Presupuesto 2026 plantea un escenario potencial de cierre del 2025. Allí se dice que el Sector Público Nacional (SPN) va a tener un superávit primario del 1,5% del PBI y uno financiero del 0,3%.

De acuerdo con un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), antes de la medida, el Gobierno esperaba juntar recursos por el equivalente al 15,75% del PBI y gastar por el 14,25% del PBI. Con relación al 2024 la caída de ingresos sería del 0,4 puntos del PBI, mientras que los gastos bajan 0,75 puntos.

Ahora, al resignar más ingresos, este año pasaría a contar con el equivalente al 15,6% del PBI. Para mantener el mismo resultado, ahora debería tener gastos por el 14,09% del PBI. lo que equivale a un ajuste de 0,91 puntos del PBI con relación al gasto año pasado.

El IARAF indica que antes de que se aplicara la rebaja de retenciones el Gobierno proyectaba terminar 2025 con ingresos por $139,21 billones (-2,1% interanual). Con la eliminación temporal de los derechos de exportación los ingresos caen a $137,93 billones (-3,3% interanual).

En cambio, si se va a la columna del gasto, el Gobierno esperaba erogar unos $126,02 billones (-0,4% real interanual). De ellos, el gasto indexado que suma $63,6 billones (+14,3%). Si el Ejecutivo tuviera que corregir el gasto primario para compensar la pérdida por retenciones, entonces tendría que ser de $124,75 millones.

Sobre el único espacio que podría operar es en el gasto no indexado, que tendría que bajar de $62,3 billones a $61 billones. Según indica el IARAF para compensar tendría que recortar 9,3% la masa salarial, 24,8% los programas sociales; 42% los subsidios a la energía y 17% la inversión real directa. Con esos números el Gobierno podría llegar a fin de 2025 con un superávit primario de $13,1 billones y uno financiero de $2,58 billones.

Pero lo más probable es que no se cumpla con el superávit de 1,5% como estaba previsto. En este caso, según estimó el IARAF el primario sería de $11,9 billones con una caída del 30% respecto del 2024, mientras que el financiero se reduciría a $1,3 billones, con una caída del 61,8% en relación al año pasado.

Y ha que tener en cuenta que se trata de proyecciones sobre el gasto que plantean una proporcionalidad entre los diferentes componentes en su comportamiento en el último cuatrimestre. El IARAF señala que de mantenerse la proporcionalidad, por ejemplo, la masa salarial tuvo un descenso acumulado del 6% en los primeros ocho meses del año por lo que en los últimos cuatro meses tendría que caer 10%, para que el cierre de 12 meses sea de una merma del 7,5%.

Últimas noticias

Dejá tu comentario

Te puede interesar

Otras noticias