El gasto público tendrá un crecimiento menor que 15% el año próximo, lo que implicaría una reducción drástica respecto de lo sucedido este año. Así figurará en el proyecto de Presupuesto 2008 que el gobierno remitirá al Congreso el viernes. Los ingresos, por otra parte, aumentarán a un ritmo de 16%, aunque la recaudación que está a cargo de la AFIP lo hará a poco más de 19%.
El contenido al que quiere acceder es exclusivo para suscriptores.
De esta forma, con ingresos presupuestarios que crecen más que los gastos, el equipo económico procura que el superávit fiscal se ubique en 3,15% del PBI ya comprometido en discursos por el matrimonio presidencial. Este año el superávit real se ubicaría por debajo de 2,7%, pero contablemente será mayor por los ingresos extraordinarios correspondientes a la reforma previsional.
Uno de los ministerios que saldrían más golpeados por el recorte del crecimiento del gasto es Planificación Federal de Julio De Vido. La tijera pasará, en particular, por el capítulo de subsidios. No será fácil cumplirlo, considerando que se trata de uno de los rubros que más aceleración tuvieron en lo que va de 2007. En los últimos meses, por ejemplo, se multiplicaron los subsidios tanto a la energía como al sector agropecuario. En cambio, se propone un crecimiento del gasto por encima del promedio (20%) para los ministerios de Salud y Educación.
Deterioro
Este año, el gasto está aumentando a un ritmo cercano a 45%, mientras que los ingresos lo hacen a cerca de 35%, lo cual generó un deterioro en el nivel de ahorro público.
Estos son otros datos que se incluirán en el proyecto de Presupuesto 2008 que en breve será remitido al Congreso:
El crecimiento del PBI llegará a 4%. Si bien se vuelve a utilizar el mecanismo de subestimar el aumento del Producto, se estima que efectivamente la economía crecerá bastante menos en 2008. Sobre todo, considerando que el gasto crecería menos y que la recuperación del ahorro público generaría, a su vez, menor crecimiento de la demanda. Por supuesto, si la expansión es mayor, habrá mucho más recursos disponibles respecto de la presupuestado.
El dólar se ubicará entre $ 3,20 y $ 3,22. Al menos ésta fue la estimación para calcular los recursos provenientes de retenciones. En el mercado se espera que el gobierno avale subas marginales de la divisa para evitar perder competitividad a causa de la inflación.
En cuanto a la suba de los precios, la inflación minorista estipulada es de 7%. Pero se acercaría algo más a la realidad el incremento de los precios implícitos que surgen de la estimación del PBI, ya que arroja un aumento de 10,1%. Como consecuencia, el Producto nominal aumentaría en 2008 14,5% (considerando la suba real y el efecto de la inflación).
El superávit comercial, en tanto, se mantendría en torno a los u$s 10.000 millones. Para ello será necesario que se mantenga alto el precio de las materias primas que exporta el país y, al mismo tiempo, que crezcan a menor ritmo las importaciones. El gobierno apuesta a frenar en los próximos meses la importación que llega de China, aunque impacta mucho la compra de combustibles líquidos para paliar los efectos de la crisis energética.
Dejá tu comentario