Botnia: frente a quejas, Timerman defendió acuerdo

Héctor Timerman

En la previa al segundo encuentro que mantendrá mañana con los combativos ambientalistas de Gualeguaychú, el canciller Héctor Timerman salió a defender ayer el entendimiento sellado entre Cristina de Kirchner y su par uruguayo, José Mujica, en torno al monitoreo ambiental del río Uruguay y de las plantas instaladas sobre ambas márgenes, incluida la cuestionada pastera de UPM (ex Botnia).

Según el ministro de Relaciones Exteriores, los asambleístas «tienen que entender» que el acuerdo rubricado por la Argentina y Uruguay «es un adelanto en política ambiental». Para la Asamblea Ambiental, en cambio, se trata de «un acuerdo político y no científico» porque no contempla un control continuo y en tiempo real -los 365 días del año y las 24 horas- de la planta finlandesa.

Por eso Timerman recalcó que en la reunión dará a los enviados de Gualeguaychú «la explicación del gran acuerdo para la Argentina, Uruguay y el medio ambiente».

El canciller también enfatizó que la iniciativa bilateral garantiza que «científicos argentinos puedan entrar a la fábrica Botnia» y, sorpresivamente, sostuvo que podrán hacerlo «12 veces por año, como mínimo». «Si un doctor ve que hay un problema grave, no dice «vuelva el mes que viene», graficó.

Sin embargo, la letra chica del acuerdo sostiene que «el número máximo de ingresos de control del Comité Científico en cada establecimiento a monitorear será de hasta 12 (doce) veces por año».

Precisamente, será ese uno de los puntos más espinosos de la reunión que se iniciará mañana a las 13 en la sede de la Cancillería argentina.

Por el lado de los ambientalistas, serán de la partida los 10 miembros que ya se reunieron con Timerman el pasado 6 de julio. La Asamblea además pidió, en una suerte de careo, que asistan también otras figuras presentes en aquella oportunidad, como el gobernador de Entre Ríos, el justicialista K Sergio Urribarri y el intendente Juan José Bahillo. Entienden los asambleístas que el Gobierno nacional incumplió las promesas blandidas en ese ámbito.

«Los dos países se han comprometido a hacer públicos los estudios; nadie tendrá dudas de lo que está pasando con el medio ambiente en el río Uruguay», promocionó ayer, en este marco, Timerman.

Mientras tanto, pende un plazo clave: el próximo 19 de agosto vence la precaria tregua de 60 días a partir de la cual los ambientalistas liberaron la Ruta Internacional 136, bloqueada durante 3 años y 7 meses. De perpetuarse este acuerdo que no conforma a la Asamblea, los vecinos no descartan volver a cortar el paso fronterizo.