29 de noviembre 2021 - 00:00

Bueno: fuerte crecimiento de la industrialización de maíz y soja

La recuperación de la producción de bioetanol junto a la mayor demanda internacional de derivados de la oleaginosa impulsaron el crushing

PAG11-SOJA.jpg

Uno de los grandes desafíos que afronta el sector agroexportador local es crecer en agregado de valor fronteras adentro. No es lo mismo exportar una tonelada de grano sin procesar que una tonelada de harina de soja o de aceite, el círculo virtuoso que se genera alrededor de la industrialización significa no solo más divisas sino también empleo e inversiones. Una buena noticia, entonces es el fuerte crecimiento que está mostrando la industrialización de soja y maíz.

En el caso de la oleaginosa, según las estadísticas oficiales, el procesamiento creció 10% en lo que va de la campaña comercial 2020/21 y 7% interanual para alcanzar las 27 millones de toneladas de grano, mientras que el crushing de maíz se ubica en un nivel récord para la fecha con 5,4 millones de toneladas.

“Luego de haber cerrado la campaña 2019/20 con el segundo menor volumen de soja industrializada en siete años (sólo superando al guarismo de la 2017/18, cuando la histórica sequía redujo fuertemente la disponibilidad de poroto en el país), la campaña actual presenta un elevado ritmo de procesamiento de la oleaginosa. En octubre se procesaron 3,3 millones de toneladas de poroto, un 7% más que en octubre del 2020. De esta manera, el acumulado desde el inicio de la campaña hasta ese mes asciende a 27 millones de toneladas, unas 2,5 millones de toneladas más que en igual lapso del año anterior”, según detallan desde la Bolsa de Comercio de Rosario.

Esto se debe, principalmente, al elevado apetito global por los derivados de la oleaginosa en el último tiempo. Desde el inicio de campaña hasta octubre, se llevan exportadas 18,8 millones de toneladas de harina/pellets de soja, unas 3,5 millones de toneladas más que en igual lapso de la campaña anterior. Además, este volumen representa el 95,4% del total de toneladas de harina/pellets obtenidos entre abril y octubre, la mayor proporción de la historia.

La industria de molienda de granos y oleaginosas local es una de las más importantes del mundo en donde operan empresas multinacionales que en la última década concretaron millonarias y constantes inversiones para crecer envíos. Lo cierto, es que a pesar de ello actualmente ostenta una capacidad ociosa superior al 50% y por eso una de las asignaturas pendientes que tiene el sector es crecer en producción de granos de calidad para sumar mayor procesamiento en las fábricas.

Mayor volumen

En este contexto, en cuanto al maíz, la entidad rosarina destaca que el total de grano destinado a la industria acumulado desde el inicio de la campaña alcanza un récord histórico a la fecha. Más de 5,4 millones de toneladas del cereal han sido procesadas, un 10% más respecto de lo industrializado a igual fecha del año previo. De ese total, 3 millones de toneladas fueron destinadas a la producción de balanceados, mientras que 1 Mt se destinó a la molienda húmeda. En ambos casos se trata del mayor volumen acumulado a la fecha en comparación con años anteriores.

“Otro aspecto que merece mención es el maíz destinado a la producción de etanol. En lo que va de la campaña, más de 914.000 toneladas del cereal fueron utilizadas para producir este biocombustible, un 43% más que en los primeros 8 meses de la campaña 2019/20.

Esto se debe a que, durante el año pasado, la irrupción de la pandemia y las restricciones a la movilidad impuestas por los gobiernos para frenar su avance afectaron fuertemente la demanda de combustibles, y, dado que el principal uso del etanol es precisamente para la producción de biocombustibles, al reducirse esta fuente de demanda cayó considerablemente su producción. No obstante, el año 2021 presenta un panorama completamente distinto. Con el levantamiento de las restricciones y la normalización de la economía global, la demanda de energía se disparó considerablemente en el último tiempo, causando un fuerte aumento en los precios de los combustibles. Así, la demanda de maíz para producción de etanol se recompuso de manera notoria y prácticamente alcanza los niveles previos a la pandemia (en el 2018/19 se llevaban destinadas 965.000 toneladas de maíz para la producción de etanol a estas alturas del año)”, consigna a modo de cierre la Bolsa rosarina.

Dejá tu comentario