14 de septiembre 2016 - 00:00

Ecosistema emprendedor argentino, más vivo que nunca

Ecosistema emprendedor argentino, más vivo que nunca
Según el último informe mundial de Global Entrepreneurship Monitor, un 29% de los adultos argentinos planea emprender en los próximos tres años. El trabajo, que en la Argentina cuenta con la participación del Centro de Entrepreneurship de la escuela de negocios IAE, estima que la mayor cantidad de emprendedores del mundo está entre las edades de 25 y 44 años. La Argentina presenta un perfil similar al del resto del mundo y mantiene la tendencia de los últimos años, con la mayor cantidad de emprendedores entre los 25 y los 44. De a poco hay emprendedores más jóvenes, entre 18 y 24 años, pero también se observa un crecimiento en emprendedores entre los 44 y los 64 años, gente mayor que cierra un ciclo en su vida laboral y profesional e incursiona en el mundo emprendedor.

Para Sebastián Sanga, socio del centro de enseñanza EducacionIT, "hoy hay una evolución muy positiva en el ecosistema emprendedor argentino. Cada vez hay más aceleradoras que colaboran con el crecimiento de startups y empresas que invierten en otras alineadas a su propia estrategia".

Según los datos de una encuesta elaborada por el centro entre sus alumnos, lo que aún los detiene a emprender, tiene que ver con los siguientes puntos: un 34% de los casos hace alusión a la falta de "Confianza y Determinación", seguida de cerca por "Presupuesto" (29%) y la carencia de una "Idea" (25%).

Algo similar sucede con la percepción de capacidades y el miedo al fracaso. Aproximadamente el 62% de los adultos considera que tiene las capacidades necesarias para poner en marcha un nuevo negocio. "Respecto al miedo al fracaso, se evidencia que ha experimentado una leve suba, pero debemos esperar a ver qué sucede cuando se consolide este período positivo en todas las variables", reflexionan acerca de este punto los responsables del informe.

El miedo al fracaso ha crecido en términos relativos. Se mide a partir de todos aquellos que vieron buenas oportunidades para comenzar un negocio, mientras que en 2014 fue el 23,5% del 32% de los adultos (7,52%), en 2015 fueron el 25,8% de 46% de los adultos (11,86%).

"Queremos que nuestros alumnos conozcan que hay un ciclo natural del emprendedor en el cual cuanto más rápido se fracase, más rápido se conseguirá el éxito. Fracasar es parte del paradigma del emprendedor y es parte del constante aprendizaje", señala Sanga y completa: "Tener una mente abierta es una de las claves más importantes a la hora de emprender".

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