25 de junio 2015 - 00:00

EE.UU. aplaca la furia de Hollande: “Ya no espiaremos a aliados”

El presidente François Hollande encabezó una reunión del consejo de defensa tras la revelación del espionaje de la NSA a mandatarios franceses. Pero una comunicación con Barack Obama evitó una crisis mayor.
El presidente François Hollande encabezó una reunión del consejo de defensa tras la revelación del espionaje de la NSA a mandatarios franceses. Pero una comunicación con Barack Obama evitó una crisis mayor.
  París - Francia calificó ayer de "inaceptables" las escuchas de Estados Unidos a los tres últimos presidentes franceses, un incendio que el mandatario estadounidense, Barack Obama, trató de apagar con una llamada en la que aseguró a François Hollande que acabará con este tipo de prácticas.

El Elíseo anunció en un comunicado que Obama "reiteró sin ambigüedad", durante una conversación de "un buen cuarto de hora" que tuvo lugar a iniciativa de Hollande, su "compromiso firme" de acabar con las prácticas de espionaje que "pudo haber en el pasado y que eran inaceptables entre aliados".

La Casa Blanca agregó que "el presidente reiteró que cumplimos con el compromiso que hicimos a nuestros homólogos franceses a finales de 2013 y que no estamos interviniendo y no vamos a intervenir las comunicaciones del presidente francés".

La entrevista telefónica sirvió "para establecer los principios que deben gobernar las relaciones entre aliados en materia de inteligencia", informó la presidencia francesa, añadiendo que "responsables franceses de inteligencia viajarán a Washington próximamente para profundizar en la cooperación" entre ambos países.

El diario Libération y el portal de información Mediapart publicaron el martes documentos sobre el espionaje de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense a Jacques Chirac (1995-2007), Nicolas Sarkozy (2007-2012) y Hollande, entre 2006 y 2012 al menos, filtrados por WikiLeaks.

Ayer a primera hora, y antes de la comunicación telefónica con Obama, Hollande había convocado en el Palacio del Elíseo un consejo de defensa, en el que participaron el primer ministro, Manuel Valls; los ministros de Relaciones Exteriores, Laurent Fabius; de Defensa, Jean-Yves Le Drian; y de Interior, Bernard Cazeneuve, acompañados por jefes militares y de los servicios de inteligencia.

La embajadora de Estados Unidos en Francia, Jane Hartley, fue llamada por la tarde por el canciller Fabius para dar explicaciones sobre el espionaje a las comunicaciones presidenciales.

Una fuente del entorno de Chirac indicó que las escuchas eran "inaceptables" y "chocantes". "Francia siempre actuó con Estados Unidos desde el espíritu de la amistad, de la confianza, de la independencia y de la franqueza", añadió.

Allegados a Sarkozy juzgaron, en tanto, "esos métodos" de espionaje "inaceptables en general y más particularmente entre aliados".

Ya en 2013, el exconsultor de la NSA Edward Snowden había revelado la existencia de un vasto sistema de espionaje de conversaciones telefónicas a varios mandatarios, como la canciller alemana, Angela Merkel, o la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.

El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, aseguró el martes por la noche que próximamente habrá nuevas revelaciones.

Agencias AFP, EFE,

Reuters, ANSA y DPA

Dejá tu comentario