"Aunque Putin no figura de hecho, para nosotros está claro que el objetivo principal de esta filtración es nuestro Presidente, sobre todo de cara a las elecciones parlamentarias y a las presidenciales de dentro de dos años, y la estabilidad política en nuestro país", señaló Peskov a la prensa.
"Es obvio que el grado de 'putinofobia' llegó a un nivel tan alto que ya no se puede hablar bien de Rusia, de cualquier éxito obtenido por Rusia. Hay que hablar mal y mucho, para hacer daño, y cuando no hay nada que decir, lo inventan", agregó Peskov.
La investigación difundida el fin de semana por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, en inglés) revela cómo empresarios y al menos un amigo personal del presidente ruso gestionaron hasta 2.000 millones de dólares a través de bancos y sociedades fantasma.
Si bien la filtración salpica a cientos de políticos, deportistas y celebridades de todo el mundo, entre ellos doce antiguos y actuales líderes mundiales, para las autoridades rusas es "obvio que el ataque está dirigido en primer lugar contra nuestro país y contra el presidente Putin en persona".
Por otra parte, Peskov calificó la investigación de poco profesional y calificada, además de acusar al ICIJ de ser una tapadera para "antiguos miembros del Departamento de Estado (norteamericano), de la CIA y de otros servicios especiales".
El portavoz también se refirió a una filtración que afecta directamente a su esposa, la patinadora Natalia Navka, que según los Panama Papers tuvo una empresa fantasma en ese país entre 2014 y 2015.
"Mi esposa nunca tuvo ni tiene sociedades opacas", dijo al respecto.
Sin embargo, el Kremlin adelantó que no presentará demandas judiciales internacionales contra el Consorcio de Periodistas, ya que no ve "nada nuevo" en las filtraciones.
"No le vemos sentido, porque se trata de especulaciones en torno a nuestro presidente que vemos todos los días", explicó Peskov.
De acuerdo con la denuncia, el músico Serguei Rolduguin, amigo de Putin y padrino de una de sus hijas, podría ser el centro de una trama de empresas fantasma de amigos del mandatario, según el diario independiente Novaia Gazeta.
Rolduguin, de 64 años, violonchelista en el teatro Mariinski, sería, en esa línea, el testaferro en esta serie de empresas fantasma gestionadas por Mossack Fonseca.
Serguei Rolduguin figura como propietario al 100% de las empresas Sonnette Overseas Inc. (SOI) e International Media Overseas (IMO), que adquirieron importantes sectores de la economía rusa a través de otras compañías offshore, siguiendo una estructura similar a la de un juego de muñecas rusas, según Novaia Gazeta.
El diario da un ejemplo: el buque insignia de la industria automovilística rusa, Kamaz, pasó en 2008 a estar bajo control de Avto Holdings Ltd., propiedad de SOI, con la ayuda activa del banco de inversiones moscovita Troika Dialog, que desde entonces pertenece a Sberbank, primer banco público.
Las inversiones sirven a veces para comprar yates u hoteles para usos personales de la oligarquía rusa. Así, 40 millones de rublos fueron invertidos en 2012 en la estación de esquí rusa Igora, donde se casó al año siguiente la hija más joven de Vladímir Putin, Katerina, revela Novaia Gazeta.
Las transacciones suelen seguir un circuito cerrado con el único objetivo de enriquecer estas empresas: en 2010, un acuerdo permite que IMO compre acciones del gigante público del petróleo Rosneft. Inmediatamente, éste anula el contrato y, como compensación, ofrece 750.000 dólares a IMO.
Generalmente, estas compañías reciben dinero gracias a los acuerdos con Rosneft o de la empresa de gas Gazprom, aunque también de "donaciones" de oligarcas cercanos al Kremlin o de préstamos preferenciales del banco ruso-chipriota RCB, en manos de un amigo de Putin.
Pero ninguna de estas operaciones habría sido posible sin la ayuda de Bank Rossia, pilar central de los montajes financieros, según el diario. Ni sin la amistad con Putin del propietario de este "banco de amigos" del Kremlin, Yuri Kovalchuk, presentado a veces como su banquero personal.
Agencias EFE y AFP |
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