Varios de ellos esperaron esa validación en las urnas -de mayor o menor grado, según el caso- para disparar públicamente, cuando todavía estaba fresca la votación, el inicio de la carrera hacia el Ejecutivo, como el peronista crítico Juan Carlos Romero (Salta), el excómico de Midachi Miguel del Sel (Santa Fe), el petrolero moyanista Guillermo Pereyra (Neuquén) y la dirigente social kirchnerista Milagro Sala (Jujuy).
Otros paladean el inicio de la batalla, pero mantienen la incertidumbre en el plano de los anuncios (o incluso por estas horas algunos intentan despegarse de esa posibilidad), aunque son mencionados con insistencia.
Por esa senda transitan el justicialista disidente Mario Das Neves (Chubut), el ruralista entrerriano Alfredo de Angeli (Entre Ríos), el kirchnerista Miguel Pichetto (Río Negro), el radical Eduardo Costa (Santa Cruz), el radical José Cano (Tucumán), la justicialista Rosana Bertone (Tierra del Fuego) y el radical Eduardo Brizuela del Moral (Catamarca).
La pretensión de batallar la continuidad del poder provincial en 2015 implica resignar un tramo de los mandatos legislativos que acaban de obtener. Veamos:
"Estamos felices y orgullosos por el acompañamiento de la gente en todos estos meses de gran esfuerzo; este resultado nos alienta a soñar con volver a gobernar para todos los salteños", enfatizó, tras cosechar en los comicios el segundo puesto en ese rubro con el 24,48% de los sufragios, contra el 29,05% de Rodolfo Urtubey (FpV), hermano del actual mandatario, Juan Manuel Urtubey.
No sólo se quedó con los dos escaños de diputados nacionales en juego; también ya piensa en volver a calzarse la banda gubernamental, que ya llevó entre 2003 y 2011, en el distrito que hoy gobierna su exdelfín, el justicialista Martín Buzzi.
"Hoy soy diputado nacional electo y tengo ese compromiso con quienes me votaron", dijo en las últimas horas, aunque admitió que "más adelante verá. "¿Si quiero volver? Tal vez sí, porque veo una provincia muy distinta de la que dejé. Pero eso no me quita el sueño; me quitan el sueño otras cosas que puedo empezar a hacer por la gente de Chubut estando en el Congreso", sostuvo.
En su debut electoral, en alianza con el peronismo disidente, De Angeli fue electo senador, mientras que Del Sel integrará la Cámara de Diputados desde diciembre.
El empresario humorístico y excandidato a gobernador no anduvo con vueltas. "Estoy muy contento y vamos intentar en 2015 la Gobernación, porque este resultado nos deja en un lugar expectante", dijo poco después de conocerse el resultado del escrutinio provisorio santafesino.
Pero el actual jefe del bloque kirchnerista en el Senado -quien en los comicios se impuso por el 50,77% sobre el Frente Progresista (24,58%) y la UCR (16,07%)- se apresuró a enfatizar que "hay estúpidos que ponen carteles que no tienen que poner" y que en cambio "hay que vivir el día a día".
En esa línea -y frente a versiones sobre una potencial postulación del intendente de General Roca, Martín Soria- días atrás Pichetto afirmó que "sería una falta de respeto a la ciudadanía hablar, cuando faltan dos años", de la discusión por la sucesión del actual mandatario, Alberto Weretilneck (socio del Frente Grande, que asumió por la sorpresiva muerte del peronista Carlos Soria).
Ayer Pichetto abrió otro abanico: reconoció que le gustaría convertirse en un eventual candidato a vicepresidente, en el marco del armado del FpV para 2015.
Sala es considerada una mandataria en las sombras, de la mano de la construcción de viviendas con fondos federales y de los miles de planes sociales que maneja. En medio de la velada interna K que mantiene con el gobernador justicialista Eduardo Fellner, su coalición debutó el pasado domingo en materia electoral y quedó como tercera fuerza, detrás del Frente Jujeño y del FpV, que integran radicales y socialistas.
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