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Liberan después de 8 días a empresario secuestrado (pagan rescate de $ 1,5 M)

Daniel Rebagliati, de 53 años.
El empresario, identificado como Daniel Rebagliati, de 53 años, es uno de los hijos de Jorge Luis Rebagliati, propietario de la firma Cintra, que tiene a su cargo la extracción de residuos en el saneamiento de la cuenca Matanza-Riachuelo.
El empresario fue capturado el pasado 27 de abril cuando salió de su casa en el barrio de Villa Devoto y se dirigía al establecimiento de su familia, en el partido de Tres de Febrero.
Tras ser capturado, los delincuentes se comunicaron con su familia para exigir el pago de u$s 2 millones. Con el correr de los días y después de varias comunicaciones, al menos cinco, las cifras fueron descendiendo hasta alcanzar el millón y medio de pesos.
Según trascendió, se acordó la liberación de Rebagliati luego de arrojar un bolso con el dinero desde un tren, entre las estaciones de Santos Lugares y Caseros. El hombre fue liberado ayer a la madrugada cerca de una remisería con poca ropa. Rebagliati había tocado varios timbres hasta que fue ayudado por la mujer que trabajaba en la remisería, que le facilitó el teléfono para comunicarse con su familia. "Apareció a tres cuadras de la agencia donde soy telefonista. Llegó a las 3.10 de la mañana a la agencia", contó la mujer, que además detalló que se encontraba barbudo y padecía mucho frío.
El final feliz para el secuestro se produjo cuando al hombre lo fueron a buscar policías de Tres de Febrero y sus familiares, para llevarlo a su domicilio, en el barrio porteño de Villa Devoto. Según se supo, el hombre dijo que los secuestradores lo trataron bien, pero lo mantuvieron encapuchado.
"Era una banda profesional y preparada para mantenerlo ocho días cautivo, gente de nivel medio y que sabía lo que hacía. No estábamos con improvisados. Se comunicaron con la familia a las tres horas del secuestro", señaló el letrado de la familia, Rafael Di Francesco, quien además es amigo de la víctima.
Por su parte, De Francisco confirmó que la víctima está "muy bien" y que su entorno se encuentra "feliz de tenerlo sano y salvo" en su casa. Algunas versiones sostenían que el hombre permaneció en un ataúd durante algunos días en los que estuvo secuestrado, aunque dicha información no había sido confirmada ni por la familia ni por el abogado al cierre de esta edición.
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