22 de julio 2025 - 00:00

El bloqueo fiscal, un procedimiento que valdría la pena revisar y actualizar

En la década de los noventa, se puso en práctica un mecanismo de protección de las declaraciones juradas anteriores que funcionó como un incentivo al consumo y la inversión

La figura del bloqueo fiscal evitaba avanzar si la dd.jj. del ejercicio era correcta 

La figura del bloqueo fiscal evitaba avanzar si la dd.jj. del ejercicio era correcta 

Después de las crisis económicas originadas en el descontrol fiscal del Estado, la población que trató de conservar su patrimonio sin dudas recurrió a diversas acciones defensivas que en muchos casos el gobierno de turno, manejando la crisis, las colocaba como ilegales.

Cuando después de la “tormenta fiscal”, viene un período de calma, los gobernantes de turno se encuentran con que la población tiene recursos que no puede utilizar ya que, como resultado de las maniobras defensivas, han quedado fuera del sistema.

Los blanqueos son una solución que han perdido atractivo en Argentina ya que después del implementado en el gobierno de Macri, además del incremento de materia imponible, se elevó la tasa del impuesto a los bienes personales del 0,25% para los bienes en el exterior al 2,25%, un despropósito con efecto en la situación del blanqueo implementado el año pasado, que solo sirvió para regularizar lo imprescindible.

Ahora, el Gobierno ha detectado que existen millonarios recursos que la gente se niega a regularizar, ya que hay que pagar la tasa del blanqueo y duda si invertir o no en el país, después de tantas frustraciones.

Actualmente, el Gobierno está implementando acciones para promover el uso de los fondos “guardados en el colchón”, con medidas de ARCA, que pueden ser revertidas y otras, incluidas en un proyecto de ley, de dudosa efectividad, sobre todo ante una sociedad a la cual los gobiernos han vapuleado con el incremento constante de la presión fiscal en los últimos años.

Esto requiere tiempo de asentamiento del exitoso plan económico, de su política de baja constante de la presión tributaria y del cambio cultural en marcha. Por otra parte, cuanto antes se usen esos recursos dormidos más rápido se podrán adelantar los tiempos de mejora de la economía y reducción de la pobreza.

El antecedente de los ‘90

El gobierno del presidente Menem se enfrentó también a este problema una vez implementada la convertibilidad y lo resolvió de una forma bastante ingeniosa, entiendo que a través de las acciones propuestas por el Dr. Tacchi.

Mediante la incorporación a la ley de procedimiento, (11683), de la ley 23.905 en el año 1991, se implementó un sistema, denominado comúnmente de “bloqueo fiscal”, que consistía en que, si se presentaba la última declaración jurada anual, que se denominaba período base, correctamente, el Fisco no podía auditar los ejercicios anteriores no prescriptos, presumiéndose que esas declaraciones juradas también eran correctas, sin admitir prueba en contrario. Esta protección operaba mientras la declaración del período base no fuera impugnada.

Este procedimiento fomentaba la correcta declaración jurada actual, y fue muy útil no solo para liberar los recursos del colchón, sino también para ayudar a la compra de compañías por inversores locales o extranjeros, ya que si cumplían con sus obligaciones fiscales correctamente, desde la compra en adelante, el bloqueo fiscal impedía la revisión de los años no prescriptos.

Palabras finales

Esta ley estuvo vigente por 10 años aproximadamente y sería muy interesante su revisión y nueva implementación, ya que tuvo muchos años de exitosa existencia y se la puede modernizar incluyendo toda la jurisprudencia generada durante su vigencia.

Contador público. Socio de Baker Tilly Argentina

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