El pedido de detención solicitado por los fiscales Carlos Stornelli y Carlos Rívolo encontró a Paolo Rocca, el titular del holding más importante de la Argentina, Techint, de viaje de negocios en México. La apelación planteada por los fiscales al fallo de Claudio Bonadio, que lo procesó en el marco de la causa “cuadernos”, envió un dardo envenenado a la Cámara Federal, encargada ahora de definir si procede encarcelar preventivamente al empresario más poderoso del país. La noticia no tomó por sorpresa a la empresa, que de inmediato volvió a respaldar a su cúpula directiva y recordó que para que algo modifique su situación procesal deberá primero intervenir la Sala I, hacia donde se dirigirán las miradas. En rigor, deberá pasar el primer tamiz del fiscal general Germán Moldes para que la prisión preventiva no quede en el camino. En su apelación, el binomio de fiscales también pidió el encierro de los empresarios procesados en la segunda tanda y del exjefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina y su exsecretario, como partícipes de la maniobra de recolección de sobornos investigada. La mayoría de exfuncionarios K detenidos aplaudieron esto último.
Fiscales piden detener a Rocca y trastornan a Cámara Federal
Apelaron procesamiento dictado por Bonadio en "Cuadernos" y solicitaron prisión preventiva. Sala I deberá atajar la brasa caliente si fiscal Moldes acompaña. Lo mismo para Abal Medina y otros empresarios.
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La Cámara integrada por los jueces trasladados Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi tiene un serio problema para atajar esta brasa caliente para el mundo empresarial, político y judicial. Ha convalidado la mayor parte de las desprolijidades de origen de la causa “cuadernos” y hasta ahora se ha limitado a apuntalar las decisiones de Bonadio. Su identificación plena con el Gobierno nacional hará que cualquier decisión sobre Rocca emita una factura que el Círculo Rojo colgará de la reja de Balcarce 50. Hasta ahora habían rechazado cualquier excarcelación (previsible) y les resta pronunciarse (en su primera prueba de fuego) sobre la tanda inicial de procesados por asociación ilícita, dádivas y cohecho. Allí los fiscales habían enviado una señal: no solo solicitaron cambios de calificación y cantidad de hechos, pidieron que a una serie de empresarios se los procese y se les dicte prisión preventiva, aunque con arreglo a una posible excarcelación, en el caso de los “arrepentidos”. De todas formas, es la primera vez que apuntan a un peso pesado como Rocca, secundado por otros empresarios como Alberto Padoán (Vicentin) y Rubén Aranda (Chimen-Aike). Ni Stornelli ni Rívolo cuestionaron la falta de mérito dispuesta por Bonadio sobre el titular de Pampa Energía, Marcelo Mindlin, quien pese a haber sido citado con Rocca esquivó un procesamiento y también la queja fiscal, con lo que le dejó solo el podio de los empresarios salpicados por los “cuadernos” al CEO de Techint.
Las chances de que el pedido de detención prospere dividen apuestas: hay quienes en tribunales sostienen que es “pour la galerie”, sin traspasar el ámbito de la fantasía, y con la oportunidad servida para que los abogados cuestionen cada coma del procesamiento inicial. Otra opción es que dentro de este esquema, el tándem Stornelli-Rivolo aporte su intento de dotar de cierta coherencia argumental el festival de preventivas que aplicó Bonadio. Ubican a Rocca como parte del “emprendimiento criminal, concebido, proyectado y sostenido en el tiempo” (asociación ilícita) con “voluntad decisiva” de participar en los sobornos. Básicamente porque “usufructuaron” los beneficios que les reportó el pacto entre funcionarios y empresarios al igual que otros que están detenidos.
Hoy conviven demasiados criterios, todos emanados del mismo juez: empresarios que niegan los hechos presos; que niegan los hechos, procesados pero libres; que niegan, con “falta de mérito”; que admiten haber dado dinero, presos; que admiten los hechos pero que dan versión “light”, procesados pero libres; y que admiten pero se “arrepienten”, procesados igual aunque libres. Algo similar ocurre con los exfuncionarios o allegados K, donde los estándares varían. Uno de los exponentes era Abal Medina que logró restrasar al extremo su procesamiento como receptor del supuesto dinero “negro” que aplicó a fines políticos, junto a su secretario, Martín Larraburu. Los exPlanificación lo celebraron en silencio.
Que el “buscapié” de los fiscales haya coincidido con el feriado bursátil en Nueva York impidió que la ADR de Tenaris sufriera consecuencias. Apenas conocida la decisión de avanzar sobre la libertad ambulatoria de Rocca, la Bolsa local reaccionó con un desplome de la acción cercano al 4%. Esas consecuencias económicas también comenzarán a jugar fuerte en el contexto de avance judicial del caso que van a estar mirando tanto en Comodoro Py como en el Gobierno.
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