14 de noviembre 2004 - 00:00

Anuncian fin de combates en Falluja: más de 1.000 muertos

Lo informó el gobierno iraquí, aunque el ejército de EEUU indicó que siguen los combates. Rebeldes desmintieron que la ofensiva haya sido un éxito.

Anuncian fin de combates en Falluja: más de 1.000 muertos
Falluja (AFP-NA).- El gobierno de Irak afirmó ayer que la batalla de Falluja terminó, aunque el ejército estadounidense indicó que los combates continuaban, mientras que las fuerzas iraquíes se preparaban para intervenir en Mosul con el objetivo de restablecer el orden.

Entre los rebeldes, "el número de muertos se eleva a más de 1.000 y hemos capturado a unos 200", aseguró el secretario de Estado para la Seguridad Nacional, Kasem Daud, durante una conferencia de prensa en Bagdad.

"Las operaciones de la ofensiva Fajr (Alba) concluyeron y sólo quedan algunos focos malignos que estamos tratando en una operación de limpieza", añadió Saud.

Sin embargo, los oficiales estadounidenses reconocieron que seguía habiendo numerosos rebeldes en Falluja (50 km al oeste de Bagdad) y que todavía hará falta bastante tiempo para acabar con ellos.

"Los responsables militares y las tropas determinarán el final de la ofensiva, y hasta el momento no lo han hecho", señaló a la AFP el teniente Lyle Gilbert, portavoz de los Marines.

Un portavoz del consejo de chura de los muyahidines de Falluja, instancia dirigente de los rebeldes, afirmó anoche al canal Al Jazeera que las fuerzas estadounidenses estaban "bloqueadas" y desmintió que la ofensiva contra la ciudad sunita haya sido un éxito.

"El anuncio del final de la ofensiva militar es la prueba de que las fuerzas estadounidenses están bloqueadas. Los criminales norteamericanos y los apóstatas iraquíes tuvieron más de 150 muertos y 270 heridos", afirmó Abu Saad al-Dlimi.

El vocero agregó que "el jeque Abdalá al-Janabi dirige actualmente a los jóvenes combatientes y los incita a la yihad (guerra santa) en Falluja".

Antes, el secretario de Estado iraquí para la Seguridad Nacional, Kasem Daud, había informado que el enemigo número uno de Estados Unidos en Irak, Abu Musab al Zarqawi y el jefe religioso al-Janabi huyeron de Falluja.

"Zarqawi y Janabi huyeron abandonando sus principios y dejando a sus partidarios frente a la muerte", había dicho Daud.

Mientras tanto, las fuerzas de seguridad iraquíes se preparaban para intervenir y restablecer el orden en Mosul, 370 km al norte de Bagdad, que se encuentra en gran parte en manos de los insurgentes.

"Vamos a intervenir en los próximos días en Mosul para restablecer el orden", declaró el primer ministro iraquí Iyad Alaui durante una visita a Nasiriya (sur), sin dar más detalles sobre el tipo de operación planeada.

"Ayer (viernes) por la noche, la policía iraquí y fuerzas especiales llegaron a Mosul. Hoy en día (sábado) otras unidades llegarán a Mosul. Estamos recibiendo llamados de las mezquitas que piden al ejército y la policía iraquíes intervenir para restablecer el orden y limpiar la ciudad de terroristas", señaló.

Según un portavoz militar norteamericano, un batallón estadounidense que participaba en el sitio de Falluja regresó a Mosul.

La ciudad del norte era escenario de saqueos, mientras que un coche bomba explotó en su entrada este, al paso de un convoy de la guardia nacional iraquí, indicó el corresponsal de la agencia AFP.

Decenas de personas saquearon el sábado una gran residencia en el norte de Mosul, propiedad de una compañía privada extranjera, poco después de la partida de sus ocupantes, constató un periodista de la agencia AFP en el lugar.

Los insurgentes armados seguían presentes en las calles, sobre todo junto a los edificios gubernamentales.

Por otra parte, un grupo de desconocidos asesinó a balazos este sábado a un dirigente del Partido Comunista iraquí, miembro del Consejo Nacional (parlamento provisorio), en un hecho ocurrido en un ruta al norte de Bagdad, según anunció un responsable de su partido.

En Ramadi, a unos 100 km al oeste de Bagdad, dos personas murieron y tres fueron heridas ayer por la mañana en enfrentamientos en el centro de la ciudad, según fuentes médicas y policiales.

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