10 de noviembre 2016 - 23:51

Contra reloj, el Gobierno busca alquilar naves para la Antártida

• SUDÁFRICA Y LA FEDERACIÓN RUSA, ÚNICAS GÓNDOLAS ESTATALES CON MEDIOS DISPONIBLES
Una vez más, la contratación de buques para atender la campaña antártica que debe abastecer las bases argentinas en el continente blanco vuelve a complicar al Gobierno. Intento por bajar costos.

Alternativas. El buque polar Agulhas ya había sido evaluado para alquiler en la campaña antártica que debe comenzar, pero fue rechazado. Copia del informe elevado por el Estados Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas con los requisitos y alternativas para paliar, nuevamente, la ausencia de servicio del rompehielos Irízar.
Alternativas. El buque polar Agulhas ya había sido evaluado para alquiler en la campaña antártica que debe comenzar, pero fue rechazado. Copia del informe elevado por el Estados Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas con los requisitos y alternativas para paliar, nuevamente, la ausencia de servicio del rompehielos Irízar.
Con la promesa de comprarlo, el Gobierno nacional negocia con Sudáfrica el alquiler de un buque polar para la campaña antártica. También dos helicópteros semipesados. A los apurones se llega a esta operación de Gobierno a Gobierno luego del fracaso de la licitación internacional que se había lanzado para contar con un rompehielos, un buque polar y helicópteros destinados al abastecimiento de las bases antárticas.

El navío en cuestión es el Agulhas, que perteneció al Programa Nacional Antártico Sudafricano, fue retirado del servicio en 2012 y pasó a ser una plataforma de entrenamiento para científicos y personal embarcado.

Walter Ceballos, secretario de Logística de Defensa, responsable de la campaña, encabezó la task force de negociadores que se completó con el comandante Conjunto Antártico, Marcelo Tarapow -hermano de quien lleva a cuestas el triste jalón del incendio del rompehielos Almirante Irízar-; y el director general de Asuntos Jurídicos del Ministerio, Pablo Tosco. El grupo viajó a Sudáfrica el 31 de octubre pasado y retornó con el compromiso de que el Agulhas estaría en el puerto de Buenos Aires el 5 de enero para iniciar la carga destinada al reabastecimiento de las seis bases permanentes y 7 temporarias que la Argentina tiene en la Antártida. Sobra entusiasmo en el pelotón oficial; claro, el día elegido está a un tris de la festividad de los Reyes Magos.

El buque polar Agulhas ya había sido evaluado -lo presentó la empresa sudafricana Meihuizen International-, y fue rechazado en el marco de la licitación pública internacional N° 40/2016 para alquilar navíos y helicópteros para la logística antártica. Ese concurso fracasó porque de los cuatro oferentes, tres no cumplieron con las condiciones técnicas requeridas en el pliego y el restante porque la oferta económica excedió en largo el monto previsto por Defensa.

El comandante Conjunto Antártico produjo el Acta de Asesoramiento Técnico N° 01/16 el 15 de septiembre pasado que fue girada al secretario Ceballos. En ese documento el comodoro de marina Tarapow, en calidad de presidente de la Comisión Técnica Asesora Especial, se expide sobre las cuatro ofertas en "los aspectos estrictamente técnicos solicitados en la licitación pública internacional N° 40/16", dice el acta. Más claro, emitió opinión sólo acerca de si los medios navales y aéreos presentados por los oferentes encuadraban en la exigencia técnica del pliego de condiciones.

En el documento, al que accedió este diario, se lee: "Oferta N° 2, Meihuizen International, no cumple desde el punto estrictamente técnico". Respecto del navío Agulhas, en el punto 2 se objeta un parámetro: la relación manga-potencia (0,25 informó) es un factor determinante de la capacidad de "empuje" o potencia que tiene un navío para abrirse paso en el hielo. También se rechazaron los dos helicópteros de a bordo por no pertenecer a un mismo operador, ser de marcas y modelos diferentes y porque uno de ellos no tiene la capacidad de carga requerida.

Exploración

La negociación con Sudáfrica ocurrió casi en simultáneo con otra que exploró oficinas públicas de la Federación Rusa, el Ministerio de Transporte, para contar con el rompehielos Dranitsyn y el buque polar Golovnin, resistidos veteranos alquilados durante la gestión Kirchner. El 4 de octubre el embajador argentino en Moscú, Pablo Tettamanti, remitió al ministro de Transporte ruso, Maxim Sokolov, la nota del ministro Julio Martínez, fechada el 30 de septiembre, donde se pide "alquilar/adquirir medios para realizar nuestra próxima campaña de verano".

Las tratativas a dos puntas se dan sin que el Gobierno haya dictado el acto administrativo que da fin al proceso licitatorio a pesar de que la comisión evaluadora emitió el 22 de septiembre pasado la recomendación de declarar el fracaso del concurso público internacional.

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