Advierten sobre otra liquidación de vientres
-
Científicos argentinos crearon una nueva variedad de soja con alto potencial de rendimiento
-
Tether, una de las empresas cripto más grandes del mundo, compró el 9,8% de Adecoagro
Estos factores no lograron ser compensados ni por el aumento de los envíos a faena durante agosto, a raíz de la sequía que se observó en zonas productoras, ni por la reducción del peso mínimo de faena implementado desde noviembre del año pasado.
En lo que respecta a la producción de carne, en diciembre descendió a 227 mil toneladas res con hueso, el segundo valor más bajo del año (el piso de producción quedó en abril, cuando se paralizó la actividad exportadora). La baja producción respondió a una menor faena y también al significativo descenso del peso promedio de la res sacrificada.
En 2006 la producción de carne vacuna llegó a 3,018 millones de toneladas res con hueso y quedó sólo 3,6% por debajo del nivel alcanzado en 2005. Esto implica que durante el último año, el sector perdió un volumen de producción similar al que había ganado en 2005 con relación a 2004.
Finalmente, en 2006 las exportaciones de carne vacuna alcanzaron un nivel de 546 mil toneladas res con hueso, quedando 26,6% por debajo del total registrado en 2005 y 1% por debajo de nuestro pronóstico de los últimos tres meses, el total fue de 467,1 mil toneladas). Dicho de otra manera, a lo largo de 2006 se logró embarcar un volumen equivalente al exportado en los primeros nueve meses de 2005.
Con respecto a los precios de exportación el comportamiento no resultó estrictamente creciente a lo largo de todo 2006. Para entender lo sucedido, hay que separar la trayectoria ascendente de los precios internacionales de los últimos cuatro años, producto del exceso de demanda que caracteriza al mercado internacional de carne vacuna, de los efectos generados por la salida y reingreso en dicho mercado de las carnes brasileñas y argentinas.
Producto de los brotes de aftosa a partir de noviembre de 2005 en el caso de Brasil, y de marzo de 2006 de la Argentina, profundizado en el segundo caso por la suspensión transitoria que aplicó el gobierno nacional durante abril y mayo del año pasado, la oferta mundial de carne vacuna se resintió durante el primer semestre del año. Esto hizo que los precios internacionales registraran fuertes incrementos durante el período analizado. Pero luego, a medida que el gobierno argentino fue levantando parcialmente las restricciones para exportar carnes frescas extra Hilton y congeladas, y los mercados cerrados por cuestiones sanitarias se fueron reabriendo tanto para los productos argentinos como brasileños, el mayor abastecimiento hizo que los precios dejaran de aumentar y descendieran en relación con los picos del segundo trimestre del año.
En 2006 el consumo interno absorbió un total de 2,472 millones de toneladas (res con hueso), es decir 3,6% más que en 2005. El consumo interno por habitante llegó a 63,4 kilogramos por año, quedando 2,65% por encima del promedio observado en 2005, según el informe de CICCRA.
En el cierre del año el precio de la carne vacuna que releva el INDEC para la elaboración del Indice de Precios al Consumidor (IPC) registró un alza de 4,4% mensual, que se agregó a la suba de 1,6% registrada el mes anterior. El aumento respondió al crecimiento del precio de la hacienda en pie registrado en octubre y noviembre (que fue de 4,1% mensual en cada mes), así como también a la estacionalidad que generan las fiestas de fin de año.
Por último, en diciembre el precio del pollo experimentó un alza de 5,8% con relación a octubre, en respuesta al significativo aumento que viene registrando el precio del maíz. El encarecimiento internacional del cereal a lo largo de un año en el cual el precio de la hacienda quedó en promedio en el mismo nivel de 2005 (a raíz de los sucesos ya analizados en secciones previas), hizo que el precio relativo novillomaíz cayera abruptamente y cerrara en un nivel promedio de 7,55.
Dejá tu comentario