15 de enero 2019 - 00:02

Subió biodiésel pero no aumentaría gasoil

EEUU oficializó la revisión de aranceles al biodiésel argentino

El Gobierno fijó ayer el precio del biodiésel que rige desde el 1 de enero en $28.341, con un aumento del 5,6% con relación a diciembre. Como este producto significa el 10% de un litro de gasoil, el precio del combustible al público podría subir alrededor del 0,6%.

En cambio, el precio del bioetanol, que equivale a un 12% de un litro de naftas, se había incrementado por resolución del 2 de enero, días antes de que YPF y las otras petroleras dispusieran rebajas en los precios de los combustibles en los surtidores.

Se entiende así que de producirse algún cambio, solo debería concretarse en el caso del gasoil, porque YPF explicó el 7 de este mes al concretar la rebaja que había considerado entre otros factores la evolución del precio de los biocombustibles.

De todas formas, las petroleras cuentan con cierto colchón como para no tener que trasladar de inmediato el aumento en el biodiésel, debido a la estabilidad con tendencia a la baja que se verifica en el tipo de cambio y a la disminución en la cotización internacional del petróleo. El valor del barril de Brent en el mercado de Londres cerró ayer en u$s59,06, más de un 13% por encima del nivel mínimo de los u$s52 que había tocado hacia la última navidad, pero todavía alrededor de un 31% por debajo del máximo de u$s 86 a que había llegado a principios de octubre.

De mantenerse más o menos estable la cotización del Brent en las próximas semanas, será difícil ver una nueva rebaja en los precios al público en febrero, porque las petroleras afirman que cuando el crudo estuvo en los máximos, los valores de naftas y gasoil en el mercado local no estaban alineados con los internacionales.

Según algunos analistas, los precios internos se mantendrán estables en las próximas semanas porque la intención de las refinadoras es seguir recuperando lo que en sus números no pudieron ganar en 2018 y al mismo tiempo ir tomando un resguardo para los meses cercanos a las elecciones en los que será difícil hacer movimientos.

Después habrá que ver si las turbulencias en esa fecha afectan al tipo de cambio y el colchón resulta suficiente. En cuanto a los precios del petróleo, los pronósticos de principios de año suponen que la recuperación no será importante. Morgan Stanley estimó que un suministro abundante en la primera parte de 2019 y una desaceleración de las importaciones de China presionarán los costos del crudo. Por eso espera que el precio del Brent promedie u$s61 en los doce meses.

Por su parte, Scott Darling, jefe de petróleo y gas de JP Morgan en Asia Pacífico, afirmó que “si la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no cumple con su compromiso de reducir la producción de petróleo a lo largo de este año, los precios del crudo Brent tendrán dificultades para encontrar apoyo”. En su opinión, si ese compromiso no se extiende a lo largo del año, los precios del Brent podrían oscilar en torno a u$s55 en 2019.

Habrá que ver si esas predicciones se cumplen y si la persistencia de la cotización internacional en torno a u$s60 junto con la estabilidad cambiaria, llegan a reflejarse en algún momento en los precios locales.

Dejá tu comentario

Te puede interesar