El gobierno no instrumentó aún los cambios anunciados en las operaciones de exportación e importación de gas. La ministra de Minería y Energía de Chile, Karen Poniachik, aseguró ayer que no fue notificada oficialmente por la Argentina del alza de 100% en el precio del gas natural. En tanto, las empresas que exportan a ese país estaban en espera de que se conociera la resolución del Ministerio de Economía que autoriza una suba en las retenciones a la exportación.
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En apariencia, la cuestión no es fácil de resolver desde el punto de vista legal. Si hay un aumento en la retención a la exportación, los compradores trasandinos podrían negarse a pagar ese impuesto. De hecho, parte de ellos no paga actualmente el derecho de exportación de 20% establecido en mayo de 2004.
Por otra parte, en este caso, se habla de una retención equivalente a 100% o más del precio de venta para pasar de un precio actual de 1,50 dólar por millón de BTU a 3,20, que ninguna empresa local afrontará como impuesto a la exportación. Por eso circuló ayer la versión de que la retención sería de 35%, pero se establecería una especie de base imponible que operaría como precio para los compradores. Pero tampoco parece legalmente posible que se modifiquen contratos privados con una resolución ministerial.
En referencia a las versiones provenientes de la Argentina, la funcionaria del gobierno de Michelle Bachelet aprovechó la situación para exhortar a que se hable con «seriedad».
«No tenemos todavía ninguna información oficial. Todo lo que hay son versiones de prensa, así que la verdad es que no corresponde referirse a ellas, y vamos a esperar la información oficial por los canales que corresponde», dijo.
Insistió en que las negociaciones bilaterales estuvieron orientadas a «lograr que el impacto de esta decisión del gobierno argentino sea el mínimo posible» para los consumidores chilenos.
Por otra parte, tampoco hay todavía una medida que reglamente cómo a partir del sábado pasado la importadora de gas desde Bolivia pasó a ser ENARSA, en lugar de petroleras privadas, y el precio del gas que pagará nuestro país ascendió a 5 dólares.
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