6 de octubre 2020 - 00:00

Buscan que dólares ahorrados sirvan para financiar economías regionales

 El sector vitivinícola presentó un plan con medidas de rápida acción

 El sector vitivinícola presentó un plan con medidas de rápida acción

A través de una consulta pública, la Comisión Nacional de Valores (CNV) anunció la creación de un régimen especial para el fomento de las economías regionales. Hasta mediados de noviembre los sectores interesados podrán formular sus consultas, propuestas y opiniones que serán tenidas en cuenta para la resolución definitiva.

Se trata de una herramienta que podría beneficiar a un sector que desde hace tiempo busca nuevas alternativas de financiamiento. La idea de promover un mercado de capitales federal, inclusivo, que permita canalizar el ahorro local hacia proyectos e inversiones con alto impacto en la economía real podría tener un efecto rápido en la generación de empleo y en el desarrollo social.

Las economías regionales son actividades productivas con diferentes cultivos y propuestas agroalimentarias con características propias en cada zona. Dentro de ellas abunda la complejidad y heterogeneidad del mundo rural. Son emprendedores, productores, empresas, industrias y pymes que llevan adelante sus propios desarrollos con múltiples desafíos, entre los cuales el acceso a un financiamiento adecuado suele ser un problema recurrente. En este caso el capital se podría utilizar para realizar mejoras tecnológicas, impulsar las exportaciones o simplemente mejorar la eficiencia en el proceso productivo.

La propuesta de la CNV se basa en una modificación sobre los productos de inversión colectiva, fondos comunes de inversión o fideicomisos financieros para que pueda comprar esos instrumentos quien lo desee, es decir está dirigido al público en general. Al mismo tiempo se pretenderá estimular la participación de cooperativas de producción en el mercado de capitales, mediante la creación de un régimen simplificado para la emisión de obligaciones negociables de dichas cooperativas, ya sea en manera individual o bajo la forma de programa, estipulando requerimientos simplificados de acuerdo con capacidad y tamaño, acotando el monto máximo de emisión y destinado a inversores calificados.

Paralelamente ya se conformó una mesa de trabajo conjunta con el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca para generar el vinculo necesario con entidades, cámaras y cooperativas del sector productivo.

El desarrollo de estas actividades regionales implicaría no sólo mejoras desde lo productivo/económico sino también transformación demográfica rural, federalización de la economía, nuevos esquemas educativos y desafíos sociales. Mayor desarrollo estimularía la creación de nuevas fuentes de trabajo, mejores perspectivas de consumo interno y posibilidad de aumentar los saldos exportables.

Con la inversión llegarían mejores condiciones de vivienda, conectividad y educación, factores clave para lograr mayor arraigo rural en una estructura demográfica en la que más del 90% de la población vive en centros urbanos.

Coninagro, que aportó datos para el proyecto de la CNV, trabaja además en un “Acuerdo Federal para la Inversión Productiva y el Empleo”. Uno de los puntos interesantes de aquella propuesta es poner en movimiento la plata que hay “debajo del colchón”. Según el BCRA existen u$s225.516 millones en depósitos bancarios, fuera del país o en cajas de seguridad. El desafío para quienes promueven este tipo de herramientas de inversión es buscar alternativas para que esos dólares se inyecten en el circuito productivo.

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