La Legislatura porteña se vio obligada a sesionar ayer, tras la actividad a medias que desarrolló durante la campaña electoral, para sancionar una norma que permita que el Mercado de Hacienda de Liniers continúe funcionando. Es que hoy entraría en vigencia la ley que impide que la actividad de los consignatarios se desarrolle en la Capital Federal. El traslado de la institución se viene postergando y a pesar de haberse creado una comisión que monitoree que se lleven adelante las obras para su instalación en la provincia de Buenos Aires, ese emprendimiento no avanzó.
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El kirchnerismo resistía anoche dar la prórroga, ya que en el bloque, la legisladora Ana Suppa, quien intervino activamente en el tema, se negó a ceder una nueva postergación.
Sin embargo, se terminó aprobando la prórroga por un año. Es decir, que la aplicación de la Ley 622, que prohíbe el ingreso de ganado en pie a la Capital Federal entrará en vigencia en 2008. Pero la empresa Mercado de Liniers SA deberá presentar, en el plazo de 120 días, los cronogramas de tareas para el traslado del mercado a San Vicente y la previsión de puestos de trabajo.
Suppa explicó que «no es ético conceder una nueva prolongación del permiso que favorezca la permanencia de los mismos consignatarios que ya habían sido beneficiados con la prórroga de un año que vence y que no hicieron nada durante el año transcurrido, ni siquiera devolver las cuatro hectáreas que pertenecen a la Ciudad, tal como se habían comprometido».
El macrismo propuso un proyecto de Daniel Amoroso para la prórroga de un año -que fue el aprobado-, mientras que sus aliados de Recrear, con un proyecto de Carlos Araujo, consideraron que eran necesarios dos años de postergación para la entrada en vigencia de la ley.
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