Escandalosa e inútil interpelación a jefe de Gabinete porteño

Un grupo de legisladores y asesores sostiene al diputado Juan Cabandié (K), para evitar que se abalance sobre las bancas PRO, desde donde lo insultan Martín Borrelli y Cristian Ritondo.

El jefe de ministros de Mauricio Macri fue atacado duramente ayer por la oposición al PRO que le criticó desde no ejecutar las partidas para la construcción de viviendas sociales hasta haber abandonado el Parque Indoamericano actualmente intrusado y no utilizar la Policía Metropolitana para custodiarlo.

Horacio Rodríguez Larreta repelió las estocadas repitiendo el mismo discurso que desde el inicio mantiene la administración macrista, es decir, endilgándole al Gobierno nacional toda la responsabilidad, especialmente por no usar las fuerzas de seguridad para desalojar el lugar y sosteniendo que «no debe haber beneficios» para los intrusos. El funcionario fue interpelado por poco más de tres horas por el conflicto de Villa Soldati.

El interrogatorio terminó con insultos cruzados y casi a las piñas, ayer en el recinto de la Legislatura porteña. Macristas y kirchneristas se acusaron mutuamente de tener punteros en el predio en tono de furia, insultos desmedidos de Cristian Ritondo y chicanas variadas del joven K Juan Cabandié, en un cuarto intermedio minutos antes de concluir la sesión, conducida por Oscar Moscariello, quien cuando aumentaba el volumen de los discursos opositores no dudó en cortar el micrófono haciendo cumplir estrictamente el tiempo asignado a cada legislador.

Del bloque peronista, Diego Kravetz entregó un proyecto de ley para poner a consideración del Ejecutivo que deroga las tres áreas que actualmente tienen a cargo las políticas de vivienda: el Instituto de la Vivienda, la Unidad de Gestión de Intervención Social (UGIS) y de la Corporación del Sur y crea la Unidad de Gestión de Vivienda de la Ciudad (UGV) como único ente en la materia. El titular del bloque de Proyecto Sur, Fabio Basteiro, acusó al funcionario de Macri de «hacer campaña con cuatro muertos», mientras la Coalición Cívica disparó también contra el Gobierno nacional. Larreta pidió dejar que la Justicia sea la que evalúe las responsabilidades de lo ocurrido y anunció que Macri declaró la emergencia sanitaria en el predio de Soldati.

Aníbal Ibarra fustigó al Gobierno porteño por abandonar el parque y dejar «que se roben las rejas» y criticó que la Metropolitana tiene «2.000 efectivos y ni siquiera pudieron ir a vigilar que no reingresara la gente». Del mismo bloque, agitó el clima Eduardo Epsztein diciendo que hubo «tres años de desfinanciamiento sistemático por decisión política», porque «le da poco en votos al macrismo la política para los pobres»; que el parque «era un descampado», y que se había puesto en valor durante la gestión de Ibarra. Exageró lanzando un insulto a Macri del que luego se disculpó, pero ya había desatado la ira de Moscariello. Larreta dijo lamentar que no le hayan hecho alguna propuesta constructiva.

Cabandié remató la polémica. Le espetó a Larreta algo referido a su «paso bochornoso por el PAMI», le preguntó acerca del llamado «comandante Rodríguez», ex empleado de la Ciudad a quien se le adjudicó supuestamente liderar la toma del parque, y habló de presuntos punteros ligados a legisladores PRO. Calificó el discurso de Larreta de «mentiroso» y reprochó que en la ejecución de partidas para viviendas hubo «un 82% de subejecución». Larreta replicó que el Gobierno nacional no había hecho una sola vivienda en Capital Federal.