El presidente Juan Manuel Santos y el máximo líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño, más conocido por sus nombres de guerra "Timoleón Jiménez" y "Timochenko", firmaron en la turística ciudad caribeña el pacto alcanzado el 24 de agosto tras casi cuatro años de negociaciones en Cuba.
La ceremonia, cargada de emotividad, se inició con un minuto de silencio por las víctimas, seguidamente del cual se realizó un canto. Luego llegó el momento más esperado en los últimos 52 años de historia colombiana: Santos y "Timochenko" rubricaron el texto y se dieron un apretón de manos.
"Nosotros vamos a cumplir y esperamos que el Gobierno cumpla", dijo en su discurso el jefe máximo de las FARC. "Que nadie dude que vamos hacia la política sin armas. Desarmemos las mentes y los corazones", instó y destacó el rol del presidente colombiano: "Encontramos en Santos un valeroso interlocutor que supo sortear las presiones que se le presentaron".
"Timochenko" ratificó que, como partido político, los exguerrilleros seguirán trabajando "contra las injusticias del capitalismo". "Nadie renunció a sus ideas. Seguiremos confrontándolas en la política", subrayó. "La sociedad colombiana debe ser totalmente inclusiva", insistió.
En un gesto esperado y necesario para el proceso que inicia a partir de ahora Colombia, Londoño ofreció "sinceramente perdón a todas las víctimas del conflicto".
Seguidamente, un avión militar surcó el cielo de Cartagena en un "vuelo de paz", que causó el sobresalto del jefe guerrillero.
"Las víctimas fueron el centro y la razón de ser de la solución de este conflicto", inició sus palabras el presidente Santos. "Hemos logrado levantarnos para decir la paz germina ya", afirmó y exclamó: "No más guerra", una lema que fue repetido por todos los presentes. "No más violencia que sembró desigualdades", continuó, para luego destacar a los "héroes de las Fuerzas Armadas" que participaron del conflicto.
El mandatario recordó que nadie como él "los combatió y golpeó tanto cuando la dinámica de la guerra lo requirió; no obstante, destacó, los guerrilleros "fueron dignos interlocutores en las mesas de negociaciones". "Hoy, cuando enfrentan su camino de regreso a la sociedad, les doy la bienvenida a la democracia. Cambiar las balas por los votos, las ideas por las armas, es la decisión más inteligente", aseguró.
Unas 2.500 personas de blanco, según el protocolo, entre ellas 250 víctimas, escucharon a quienes, enemigos por décadas, lograron lo que parecía imposible. Al acto asistieron quince jefes de Estado, entre ellos el cubano Raúl Castro, anfitrión de las conversaciones auspiciadas también por Noruega, Venezuela y Chile; el jefe de la diplomacia estadounidense, John Kerry; el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon; el presidente argentino Mauricio Macri, entre otros.
"Estados Unidos nunca le daría impunidad a Bin Laden. Pero Santos se lo permite a 'Timochenko'", reaccionó el expresidente colombiano Álvaro Uribe. El político de derecha buscó, con una carta, convencer a los dignatarios invitados a que no asistieran al histórico acto. El pedido fue masivamente desoído.
En tanto, la Unión Europea (UE) decidió suspender a la guerrilla de su lista de grupos terroristas, una primera medida de los 28 para apoyar al Gobierno colombiano en el período que se inició ayer con la firma de los acuerdos.
El pacto se firmó con un "balígrafo", un bolígrafo elaborado con balas, una réplica del cual fue obsequiada a los visitantes. Entre otros gestos, el presidente Santos entregó a "Timochenko" un prendedor de una paloma blanca, que el líder guerrillero colocó en su camisa.
Al mediodía, en la iglesia de San Pedro Claver, el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano y enviado del papa Francisco al acto, encabezó "una oración por la reconciliación de los colombianos", que se replicó en todos los lugares de culto del país.
Para entrar en vigor, el acuerdo debe ser aprobado en un plebiscito convocado para el domingo, que según las últimas encuestas será favorable al "Sí (ver página. 19).
Agencias AFP, ANSA, DPA, Reuters y EFE, y Ámbito Financiero |
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