1 de junio 2020 - 23:00

Exclusivo: Cristina y Duhalde, los dos expresidentes espiados por la AFI durante la era Macri

Una unidad de al menos 15 espías seguía en secreto a figuras de distintos ámbitos. Bajo fuerte hermetismo se investiga en Lomas de Zamora. Rodríguez Larreta, Vidal, Ritondo y Massot los objetivos dentro de Cambiemos. En exclusiva, parte del listado que incluye jueces y hasta futbolistas.

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La causa judicial por espionaje ilegal que se tramita en el juzgado federal de Lomas de Zamora tiene dos particularidades que la transforman en la de mayor impacto político de la década: la cantidad de pruebas que certifican la producción de inteligencia clandestina por parte de la AFI y la jerarquía de los personajes quienes fueron víctimas de esos seguimientos. Según pudo corroborar Ámbito hubo dos expresidentes que fueron objetivos de las tareas de un grupo enquistado dentro de la central de espías comandada por Gustavo Arribas. Cristina de Kirchner y Eduardo Duhalde aparecen en los registros del grupo investigado por el juez Federico Villena junto a una abrumadora cantidad de jueces, políticos, empresarios, diputados, miembros de la Iglesia Católica, gobernadores, intendentes, referentes sociales. La hija de la vicepresidenta, Florencia Kirchner también fue espiada. Bajo un fuerte hermetismo y secreto de sumario, el juzgado avanzará esta semana en la citación de quienes fueron damnificados por esta maniobra.

Pero el listado –bajo un riguroso análisis de la prueba (fotos y videos)- no se limita a políticos de la entonces oposición a Cambiemos, sino a integrantes de la propia coalición de gobierno, lo que vuelve aún más escandalosa la trama y le otorga verosimilitud a la operatoria de los espías. El jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta fue seguido por la organización, lo mismo que su segundo, Diego Santilli. La exgobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal y su exministro de Seguridad Cristian Ritondo también integran la nómina de espiados. Todos tienen la característica de responder a un ala definida del PRO, lo que también puede tener consecuencias políticas cuando la causa escale. Los espías también dedicaron mucho tiempo a Nicolás Massot, quien fue jefe de la bancada macrista en Diputados.

Cada “operación” tenía un nombre clave, muchos de los cuales hacían referencia a alguna metáfora física, sin mucha originalidad. Otro dato relevante: la AFI dedicó mucho interés a ir tras los pasos de varios futbolistas, algo que genera suspicacias por el oficio de Arribas de intermediario de jugadores. Existen registros, a su vez, de figuras del espectáculo, un rubro hasta ahora desconocido en la trama. Y también en el plano del Poder Judicial: al menos dos jueces del máximo Tribunal fueron objeto de espionaje, así como el camarista Martín Irurzun, de quien en su momento trascendió un café compartido con el operador Fabián “Pepín” Rodríguez Simón.

Una ráfaga de fotos grafica el seguimiento al gastronómico Luis Barrionuevo y otro similar al presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, monseñor Jorge Lugones. El espionaje se extendió también a los denominados “curas villeros”. Se sigue analizando la prueba para discernir la producción propia de los espías, que en varios casos habían tomado una foto de Google para descargar en su celular y así tener confirmación visual de su objetivo. Los nombres que revela Ámbito Financiero fueron víctimas del accionar concreto de los seguimientos, incluidos los periodistas Carlos Pagni y Hugo Alconada Mon. Cuando se concreten las citaciones, se abrirá el paso a la presentación como querellantes de quienes hayan sido afectados.

Si la punta del ovillo fue el presunto narco Sergio “Verdura” Rodríguez a través del cual se llegó al abogado F. M (no se revelarán sus nombres reales por ser agentes activos de la AFI), el correlato de la Dirección dentro de la AFI que tenía a cargo este grupo de tareas, estaba encabezado por A.R, quien era el jefe operativo del “raviol” –como se dice en la jerga- de unos 15 agentes, algunos provenientes de la Policía de la Ciudad que se dedicaban al espionaje con fines políticos y quizás extorsivos.

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