Cortes de luz: 5 consejos para ahorrar energía desde casa

Para reducir el valor de la factura de luz o por una cuestión ecológica, disminuir el consumo de energía es importante. Conocé cómo hacerlo de forma sencilla.

El verano es una de las estaciones en la que más energía se gasta, por el uso de los aires acondicionados y ventiladores. Los altos niveles de consumo pueden producir cortes de luz por sobrecarga de energía y además una factura de luz con un monto muy elevado.

Seguí estos simples consejos y conocé cómo disminuir el consumo desde tu propio hogar, y así ayudar al medioambiente.

5 consejos para ahorrar energía

Usar focos bajo consumo

Las lamparitas de bajo consumo funcionan de forma similar a los tubos fluorescentes, pero, a ser fríos, ahorran entre un 50% y 75% de energía, y duran más tiempo que los clásicos.

Ahorro de energía

Descongelar el freezer

La escarcha que se forma dentro del congelador crea un aislamiento que puede aumentar un 20% su gasto eléctrico. Por eso, es importante evitar la acumulación de hielo, siguiendo los pasos que describa el manual de cada electrodoméstico.

Lavarropas

Se recomienda usar el lavarropas lleno de ropa hasta el tope que establezca cada máquina, ya que así se ahorra agua y electricidad.

Ahorrar

Graduar el aire acondicionado

La temperatura recomendada para usar el aire es 24°, ya que gasta menos y es el más acorde para mantener una temperatura agradable. Es importante tener en cuenta que cada grado extra representa un 7% mas de consumo.

Lavar con agua fría

Calentar el agua a altas temperaturas para lavar la ropa es una de las causas por las que el lavarropas uno de los electrodomésticos que más consume. Se recomienda lavar en frío, ya que hoy día no es necesario para quitar las manchas.

Ecología

¿Gasta más un ventilador o un aire?

Los sistemas modernos de aires acondicionados están muy optimizados para generar el menor consumo posible al enfriar un ambiente. Los ventiladores no proporcionan aire más frío, sino que mueven el que está a su alrededor.

Esta diferencia en las funciones hace que el consumo energético de un ventilador sea menor al de un aire acondicionado, que puede llegar a gastar hasta un 90% más que un ventilador. Aunque el consumo eléctrico del ventilador es menor, lo que ofrecen ambos aparatos es diferente, y no tienen el mismo efecto en las necesidades de los usuarios.

Por lo tanto, los ventiladores son más recomendados en zonas donde las temperaturas sean más templadas y los aires acondicionados están indicados para zonas donde las temperaturas sean más extremas y requieran reducir la temperatura en la casa.