25 de octubre 2018 - 10:10
Preocupante: en Argentina nacen 7 bebés por día de madres menores de 15 años
"El embarazo en la adolescencia es un factor crítico en la inequidad de género y presenta mayor incidencia en los hogares de menores recursos, inequidades de género y de clase que se exacerban cuando la tenencia de un hijo es no intencional. Solo por dar un ejemplo, mientras que en la Ciudad de Buenos Aires los recién nacidos de menores de 20 años representan el 6% de los partos, en Formosa, Chaco y Misiones ese porcentaje alcanza casi al 25%", informó el Dr. Daniel Rolón, Secretario Consultor del Comité de Adolescencia de la SAP.
Por su parte, la Dra. Rosa Pappolla, médica pediatra, también miembro del Comité de Adolescencia de la SAP sostuvo que "en la juventud (y, en particular, durante la adolescencia), se comienza a decidir sobre eventos claves que tendrán un peso crucial en el futuro. Estos van desde la finalización de la educación media, el inicio de la vida laboral, la salida del hogar de origen, la formación de un hogar propio y el comienzo de la vida sexual y reproductiva. Por eso, la importancia de un Estado presente que garantice los derechos sexuales y reproductivos a través de la provisión de información, insumos y servicios de calidad en estas poblaciones".
Particularmente, desde la SAP informaron que preocupa el número de embarazos en menores de 15 años, dado que su impacto en la salud integral y en la vulneración de derechos es crítico: a menor edad aumenta la probabilidad de que ese embarazo sea producto de un abuso sexual. Por otro lado, en las menores de 15 años de países de ingresos bajos y medios, el riesgo de muerte materna es dos veces superior al de las mayores, además de tener más riesgo de complicaciones en el embarazo y en el nacimiento.
Es importante tener en cuenta que los niños aprenden habitualmente de sexualidad en sus hogares. Aunque el tema no sea dialogado abiertamente, la actitud de los padres, sus roles en el hogar y su forma de encarar aspectos cotidianos influyen en el desarrollo de conductas sexuales y en la forma de comunicarse con los demás. Algunos estudios muestran que los adolescentes al tomar ciertas actitudes tienen en cuenta lo que les transmitieron los padres, ya sea a través del lenguaje verbal como mediante de sus acciones.
"Hay que tener en cuenta que los medios de comunicación ejercen una fuerte influencia en las conductas, valores y creencias. Según la Academia Americana de Pediatría, al finalizar el colegio, los adolescentes han estado expuestos a más horas de pantalla que a horas de clase. A veces, no es el tiempo transcurrido frente a las pantallas el problema real, sino la actitud del niño y de sus padres. Por ejemplo: ¿Hay una pantalla en cada cuarto?, ¿saben los padres qué ven sus hijos?, ¿tiene la computadora filtro para la pornografía?, ¿se dialoga sobre los programas vistos?, ¿se habla de ternura, amor, privacidad, confidencialidad en las relaciones?, ¿cómo es la relación hombre/mujer en la casa?", reflexionó Pasqualini.
"También la escuela juega un rol esencial, ya que allí es donde permanecen más tiempo niños y adolescentes. Y desde el gobierno se requieren campañas de sensibilización a través de los medios masivos de comunicación y las tecnologías de la información y comunicación (TIC)", completó el Dr. Rolón.
Algunas estrategias para lograr la disminución del embarazo en la adolescencia
• Los profesionales de la salud que atienden adolescentes deberían estar familiarizados con el marco normativo vigente, en cuanto al interés superior del adolescente, el concepto de autonomía progresiva, la privacidad y su derecho a expresar su opinión y a ser escuchado en todos los asuntos que lo afecte. Y conocer las guías y protocolos para la atención de situaciones complejas que pueden ser identificadas ante una situación de embarazo, como la detección del abuso sexual, el maltrato infantil o la interrupción legal del embarazo.
• Es fundamental promover una salud sexual libre de coerción, placentera y responsable.
• Los pediatras deben tener en cuenta que las consultas sobre anticoncepción constituyen una demanda que requiere ser satisfecha en forma urgente. La dación o prescripción de métodos anticonceptivos: de barrera, hormonales, de larga duración y la anticoncepción de emergencia, debe hacerse cada vez que sean requeridos por cualquier adolescente, sin ningún otro requisito que su consentimiento y su evaluación integral en Salud.
• Cuando el Embarazo ocurre en menores de 15 años siempre deberán pesquisarse relaciones de poder y/o abuso.
• El seguimiento de las adolescentes embarazadas requiere de un accionar interdisciplinario e intersectorial por parte de profesionales capacitados y empáticos. Es fundamental la articulación con otros sectores: educación, organismos de protección de derechos, ONG y la comunidad como apoyo para su desarrollo autónomo. Y comprometer al varón en las acciones destinadas a la prevención del embarazo no intencional en la adolescencia.
• Es fundamental que cualquiera sea el método anticonceptivo indicado, remarcar que el uso del preservativo es lo único que previene del sida y de otras infecciones de transmisión sexual (ITS). Para lo cual es necesaria la presencia de profesionales de la salud idóneamente formados y comprometidos en los centros de salud.
"En la adolescencia, la persistencia de altas tasas de embarazos y de infecciones de transmisión sexual, como el VIH, hacen imprescindible el fortalecimiento de las políticas públicas que permitan mejorar el acceso de la población adolescente a los derechos sexuales y reproductivos, derechos que incluyen la protección ante la violencia y abuso, así como la promoción de las capacidades autónomas mediante formación e información adecuada y la provisión de los recursos necesarios", concluyó la Dra. Pappolla.
La información adecuada, efectiva y clara, más el acompañamiento desde la infancia, tanto desde la familia, la escuela, las sociedades científicas y el Estado presente a través de políticas públicas, son imprescindibles para mejorar la salud y calidad de vida de la población adolescente.
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