Se aseguró el futuro con los millones que ganó con un canción escrita en 30 segundos: la historia de Merv Griffin

Lo que empezó como una nana para su hijo, terminó de ser uno de los éxitos que le garantizó millones de dólares a él y su familia.

Logró generar millones con una curiosa ocurrencia y al día de hoy le aseguró una fortuna a su familia.

Un cantante creó una melodía en 30 segundos que generó millones en televisión. Merv Griffin, con talento y visión, brilló desde sus inicios en la música hasta conquistar el espectáculo. Su vida, desde escenarios pequeños hasta un legado imborrable, marcó una época en la industria del entretenimiento.

Con carisma y olfato para los negocios, convirtió una chispa creativa en un éxito financiero. Su trayectoria atrajo audiencias globales, transformando el entretenimiento. Los detalles de su carrera muestran cómo una idea fugaz puede forjar una fortuna duradera en el mundo del espectáculo global.

Griffin logró crear un éxito que le garantizó millones de dólares a él y su heredero.

Su familia sigue cobrando las regalías del famoso single: quién fue Merv Griffin

Merv Griffin, nacido en 1925 en California, comenzó como cantante en radio y orquestas, luego actuó en cine y Broadway. Desde 1962 hasta 1986, presentó The Merv Griffin Show, un programa de entrevistas que atrajo a figuras como presidentes y estrellas del espectáculo.

Griffin creó Jeopardy! en 1964, inspirado por su esposa Julann, y Wheel of Fortune en 1975, ambos éxitos televisivos. Compuso una melodía de 30 segundos, “Think”, para Jeopardy!, escrita como una nana para su hijo Tony en medio minuto.

Al vender su productora en 1986 por 250 millones de dólares, Griffin retuvo los derechos de “Think”. Su familia, liderada por su hijo Tony, sigue recibiendo regalías cada vez que la melodía suena en episodios, eventos o películas, acumulando más de 200 millones.

El patrimonio de Merv Griffin al momento de su muerte

El patrimonio de Merv Griffin se estimó en 500 millones de dólares al morir en 2007, según fuentes especializadas. Su riqueza incluyó ganancias de Jeopardy! y Wheel of Fortune, la venta de su productora y regalías de la canción “Think”, que generó entre 70 y 80 millones hasta 2005.

Griffin invirtió en bienes raíces, adquiriendo el hotel Beverly Hilton en 1987 y propiedades en Atlantic City. Estas compras, junto a sus programas, aumentaron su fortuna. Su visión empresarial convirtió ideas creativas en negocios rentables que marcaron la industria del entretenimiento. Su hijo Tony heredó sus empresas, recibiendo al menos 2 millones anuales y el 60% de futuras ventas. Tras pagar 50 millones en impuestos, el legado de Griffin persiste, con regalías de “Think” asegurando ingresos continuos para su familia.