Argentina jugaba anoche hasta último momento la carta política en una negociación con el FMI que seguía moviéndose a dos bandas entre los mensajes hacia la interna y las negociaciones a marcha forzada que mantuvo todo el día Martín Guzmán con el staff del organismo.
La política también en stand by a la espera de datos sobre el FMI
Silencio desde la tarde. Anuncio clave que llegó desde la televisión en NY disparó consultas en la oposición. El Congreso se prepara para analizar acuerdos. Protestas se limitaron a piqueteros.
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Toda la política pareció suspender acciones ayer a la tarde, y esto involucra tanto a la oposición como el oficialismo de todos los colores. Salvo por piqueteros de izquierda como por alguna declaración personal, pocas definiciones se escuchaban ayer por la tarde desde todo el arco político.
La inminencia del vencimiento de hoy con el FMI por u$s731 y la certeza que corría en la oposición sobre la negociación que estaba en marcha, aunque sin final a la vista, bastó para suspender acciones.
Desde Honduras Cristina de Kirchner no opinó sobre la deuda, a diferencia de lo que había sucedido el miércoles pasado, tampoco lo hizo parte del kirchnerismo duro, aunque si existió una declaración de diputados oficialistas en contra de la deuda.
Así un grupo del Frente de Todos acusó a Juntos por el Cambio de “atacar al Gobierno” para “condicionarlo en la negociación a favor de los intereses extranjeros”. En realidad se trató de representantes de movimientos sociales que están dentro del bloque oficialista de Diputados. Así el comunicado en contra de la deuda y el ajuste llevó la firma de Juan Carlos Alderete (Corriente Clasista y Combativa), Verónica Caliva (Partido del Trabajo y del Pueblo-Salta), Leonardo Grosso (Movimiento Evita), Natalia Souto (Somos-Barrios de Pie) y Eduardo Toniolli (Movimiento Evita).
“El FMI es corresponsable de esta situación, no permitiremos un acuerdo que tenga consecuencias negativas sobre el empleo, la producción y el bienestar de nuestro pueblo”, dijeron.
El resto de la dirigencia estaba mas preocupado, incluido todo Juntos por el Cambio, estaban mas preocupados en ver la evolución de los mercados con un dólar Blue superando los $222 y las reuniones en la Casa Rosada donde Alberto Fernández se había encerrado con Guzmán y Sergio Massa.
La acción comenzó a calentarse hacia la tarde cuando se conoció que el FMI había convocado a una reunión virtual del directorio a las 8 de la mañana hora de Washington para analizar el acaso argentino. Con la inminencia del pago quedó claro que, al menos, el país había negociado que hubiera un anuncio sobre la marcha de la negociación.
La expectativa subió en las oficinas del Congreso cuando a las 21,33 hora argentina se vio en televisores el anuncio de la agencia Bloomberg desde EE.UU. que Argentina había llegado a un acuerdo con el FMI sobre el sendero fiscal a incluir en el memorandum de entendimiento. Fue el dato más concreto sobre algún avance, habida cuenta del hermetismo de la Casa Rosada que a través de Gabriela Cerruti sólo confirmó que las negociaciones continuaban pero que aún no existía un acuerdo.
El silencio de la política se hizo más evidente aún. Estaba claro que hoy habría algún anuncio desde Washington y que el país se preparaba para hacer el pago de hoy y el del martes.
Desde ese momento comenzaron los chequeos dentro de la oposición, sobre todo para tomar posiciones sobre lo que deberá suceder una vez que se confirmen los avances.
Hubo otros indicios sobre lo que sucedía entre la Rosada, Economía y Washington. Uno de ellos lo dio Juan Manzur, quien aseguró que en el Gobierno “hay decisión política y vocación de pagar” al FMI.
Lo hizo en un acto realizado en la localidad bonaerense de Escobar, en el que el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, sostuvo que la negociación con el FMI “no va a detener el crecimiento de la Argentina”.
Al término del acto de inauguración de obras viales en Escobar, Manzur manifestó a periodistas que en el Gobierno “hay decisión política y voluntad de pagar” al FMI.
“Estamos atravesando horas importantes, llevando adelante una negociación que no queremos hacer, pero que de todos modos la hacemos debido a la irresponsabilidad de otros”, dijo Katopodis.
Matías Kulfas también aportó: “Estamos en condiciones de llegar a un acuerdo que nos permita sostener la reactivación”.
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