6 de abril 2006 - 00:00

Se formó un bloque PJ anti-Kirchner: son 20

Los diputados del ex duhaldista Peronismo Federal dieron ayer el paso final de un proceso que estaba acordado hace meses: decidieron dividirse entre quienes apoyan al gobierno con un fervor superior, incluso, al propio kirchnerismo, y el grupo que desde ahora se mantendrá en una oposición un poco más dura. La decisión, juran los rebeldes, no se tomó ayer por una situación especial, sino como final de un proceso, aunque en la sesión de ayer de Diputados para ratificar el decreto de necesidad y urgencia con el que Néstor Kirchner creó la nueva empresa AySA, el nuevo bloque optó por abstenerse en lugar de apoyar al gobierno como sus ex compañeros del Peronismo Federal, algo que se preocupó de dejar en claro -en medio del aplauso de los kirchneristas- Graciela Camaño.

Fue esa la línea más clara para demostrar por dónde pasó la división. La ruptura de los ex duhaldistas se oficializó mediante una carta que le enviaron a Alberto Balestrini, presidente de Diputados, en la que le comunican la formación del bloque Justicialista Nacional y el interbloque Justicialista Nacional que abarcará también a los bloques Vida y Compromiso y Producción y Trabajo. Es decir, que el Justicialismo Nacional estará integrado por los ex duhaldistas más rebeldes al gobierno, dos riojanos menemistas -Adrián Menem y Alejandra Oviedo-, los seguidores de Adolfo Rodríguez Saá en Diputados y los dos legisladores del sanjuanino Roberto Basualdo.

  • Presidente

  • Todos quedarán bajo la presidencia del bonaerense Jorge Sarghini que firmó la carta de secesión junto Luis Lusquiños, Eduardo Camaño, el peronistamacrista Cristian Ritondo, Francisco de Narváez, Adrián Menem, Gustavo Ferri, Nélida Doga, Stella Maris Peso, Carlos Dellepiane, Marina Cassese, María del Carmen Rico, María Torrontegui, Juan José Alvarez, Alejandra Oviedo y por el interbloque, los sanjuaninos Guillermo Baigorri y Adriana Marino.

    En total el nuevo bloque tendrá 18 integrantes, más dos sanluiseños que están de licencia, Alicia Leme y Hugo Franco, que fueron anunciados también como integrantes a pesar de no haber firmado el manifiesto revolucionario. En la otra vereda, en el ahora Peronismo Federal kirchnerista, quedan 19 integrantes entre los que se listaron José María Díaz Bancalari, Carlos Ruckauf, Graciela Camaño, Luis Barrionuevo, Alfredo Atanasof, el riojano Mario Santander, Mirta Pérez y otros duhaldistas históricos como Jorge Landau y Jorge Villaverde.

    La decisión de ayer no fue más que una exteriorización de lo que venían siendo las batallas campales que estallaban en cada reunión del Peronismo Federal a la hora de definir postura frente a los proyectos del oficialismo. En algún caso, por ejemplo, hace 15 días, se había llegado al límite de la agresión física. Pero más allá de esas típicas guerras dentro del peronismo, del que los rebeldes anunciaron que no se irán, la decisión de ayer implica cambios en el esquema de poder dentro de Diputados. La vicepresidencia tercera de la Cámara, hasta ahora sin definir, le hubiera correspondido por número al peronismo federal. La reclama también el interbloque de partidos provinciales, liderado por el macrista Federico Pinedo. Pero el kirchnerismo prefirió postergar la decisión mientras utilizaba ese cargo como una zanahoria para llevar al recinto a los rebeldes duhaldistas. Esa estrategia no terminó sirviendo para ninguno de los dos grupos. El Frente para la Victoria perdió ahora una parte de sus aliados del ex duhaldismo, que no en todos los casos pero sí en muchos acompañó al gobierno en las votaciones. Le costará así más trabajo reunir los dos tercios de los presentes para habilitar temas cuando el «Justicialismo Nacional» se una al ARI y el radicalismo, algo que prometen será frecuente.Y en segundo término, quedó consagrada de hecho como vicepresidenta tercera de la Cámara la neuquina Alicia Comelli, por superar en númerolos provinciales al Peronismo Federal. Ese cargo, los ex duhaldistas lo pretendían para Eduardo Camaño, que ahora quedó mucho más lejos de ocupar el sillón. Las incógnitas, de todas formas, eran muchas: ¿cuánto tiempo podrán mantenerse como bloque independiente los ahora libres de mácula opositora del Peronismo Federal? El pase de esos 19 al bloque Frente para la Victoria parece hoy condicionada sólo por dos hechos clave: la voluntad del gobierno de mantenerlos todavía fuera de la bancada oficial -una estrategia que con la división de ayer pierde algo de sentido- y la pretensión de Díaz Bancalari de presidir el bloque que lo incluya. Por ahora, sólo seguirá como jefe de los 19 ex rebeldes.

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